A Ángel Rafael Ramos Pereira, de 17 años de edad y Julián José Landaeta Guarenas (19), los asesinaron en sector Las Parcelas de El Cascarón en El Alto de Soapire de Santa Lucía del Tuy, la madrugada de ayer
A las 8:30 de la noche del pasado viernes, dos jóvenes fueron asesinados con disparos de escopetas en el rostro, por uno sujetos armados. El suceso tuvo lugar en un camino de tierra del sector Las Parcelas de El Cascarón en El Alto de Soapire de Santa Lucía del Tuy.
La policía informó que los infortunados respondía en vida a los nombres de Ángel Rafael Ramos Pereira, de 17 años de edad y Julián José Landaeta Guarenas (19). A ambos, les desfiguraron los rostros con los impactos de perdigones de las armas largas. Los dos, murieron de inmediato.
Por su parte, familiares de Landaeta Guarenas señalaron que éste trabajaba con su padre cuidando un ganado y cosechando frutos en la parcela de la familia. Aseguraron que el mismo era sano y sin problemas de conducta.
Bebida mortal…
Pudimos conocer que Ramos Pereira y Landaeta Guarenas le pidieron, a un pariente de este último, 550 bolívares para comprar una botella de anís. Una vez con el dinero en las manos, los jóvenes fueron por el mandando en un sector adyacente a la comunidad donde habitaban. Cuando regresaban, fueron sorprendidos por los escopeteros, quienes sin mediar palabra alguna les dispararon en la cara. Los cadáveres fueron avistados a eso de las 6:00am de ayer por vecinos de la zona. Éstos, alertaron a los parientes de Ramos Pereira y Landaeta Guarenas del hecho.
Le correspondió a una comisión de Polipazcastillo resguardar el área, mientras que le Cicpc realizó el levantamiento de rigor.
“El Tiquin” y su banda
Un peligroso sujeto, apodado “El Tiquin” está señalado por ser el responsable de este doble asesinato. En el suceso participaron además unos hampones apodados “Los Castros”. Estos antisociales, están agrupados en una banda delictiva que atemoriza y azota al sector. Al parecer, los mismos han cometido varios crímenes y robos. También, los acusan de sacar a las fuerzas a las familias de sus casas las cuales después venden en el mercado negro o l utilizan como guarida. Los pilluelos portan armas automáticas y escopetas
MIP-TUY Agencia/Jean Carlos Rodríguez
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