La Cámara Automotriz de Nueva Esparta (Adane) manifestó su preocupación ante la caída de los precios del petróleo porque la deuda del Estado con ese sector supera los 3 mil millones de dólares.
Gabriel Briceño, presiente de la Adane, dijo que debe existir un acercamiento y una fórmula que pueda llevar adelante una salida que garantice la permanencia en el país de muchas marcas en situación crítica y su posible cierre de operaciones.
Indicó que algunas ensambladoras que se han visto obligadas a parar en virtud de que no mantienen la cantidad de material de ensamblaje suficiente. Advirtió que se podrían ver afectadas las familias de más de 50 mil trabajadores en todo el país.
También resaltó que los consumidores hoy en día no tienen la posibilidad de reparar sus vehículos y el parque automotor representa un deterioro constante y el robo de partes se ha acentuado como consecuencia de la falta de repuestos.