Durante la sesión de este lunes en la Organización de Estados Americanos, el embajador de Venezuela, Roy Chaderton, fijó postura sobre la medida tomada por el presidente Nicolás Maduro relacionada con el cierre de la frontera
Colombia y Venezuela se encontraron el lunes en la OEA para defender sus puntos de vista sobre el porqué del cierre desde hace más de una semana de la frontera entre los dos países luego de que presuntos contrabandistas colombianos -señalados por el Gobierno de Maduro como paramilitares- hirieron a tres militares venezolanos.
El representante de Venezuela, Roy Chaderton, señaló que el cierre de la frontera ordenado hace dos semanas por el presidente Nicolás Maduro fue una decisión «democrática». «Se trata de una situación humanitaria grave, compleja» que debe ser discutida en una reunión de cancilleres de la OEA «lo más pronta posible», había pedido el embajador colombiano Andrés González
La OEA rechazó este lunes la solicitud de Colombia de discutir en una reunión especial de cancilleres la crisis diplomática entre ese país y Venezuela, provocada por el éxodo forzado de miles de colombianos de territorio venezolano.
«Vamos a continuar en nuestros planteamientos (…) Esto apenas comienza», dijo el embajador colombiano Andrés González, tras la votación.
La convocatoria a la consulta de cancilleres de la Organización de Estados Americanos (OEA), que la ministra de Relaciones Exteriores colombiana, María Ángela Holguín, había propuesto el pasado jueves, obtuvo 17 votos, uno menos de los necesarios para alcanzar la mayoría necesaria.
A Bogotá la acompañaron Uruguay, Estados Unidos, Chile y México, entre otros, mientras que Venezuela contó con el respaldo de Ecuador, Haití, Bolivia y Nicaragua.
Otros once países se abstuvieron, incluyendo Panamá, que insistió en su ofrecimiento de ser mediador entre Colombia y Venezuela. Dominica estuvo ausente.
Durante la reunión de más de tres horas en la sede de la Organización de Estados Americanos (OEA) en Washington, Colombia y Venezuela expresaron puntos opuestos sobre la situación fronteriza, ante las señales de preocupación y los llamados al diálogo de los demás países de las Américas.
Colombia había pedido la «pronta reacción» de la OEA para atender la situación «absolutamente global, impostergable y trascendente» de los desplazados colombianos -un millar de deportados y miles más que han huido por amenazas y miedo a las expulsiones forzadas, según cifras colombianas.
«Se trata de una situación humanitaria grave, compleja» que debe ser discutida en una reunión de cancilleres de la OEA «lo más pronta posible», había pedido González.
Pero Venezuela defendió las acciones en la frontera y minimizó la reacción de Colombia.
El representante de Caracas ante la OEA, Roy Chaderton, señaló que el cierre de la frontera ordenado hace dos semanas por el presidente Nicolás Maduro fue una decisión «democrática».
Para el diplomático, la verdadera «crisis humanitaria es la que ha producido el éxodo de cinco millones y medio» de colombianos hacia Venezuela, haciendo referencia a los desplazados por el conflicto armado que afecta desde hace más de medio siglo al país vecino.
Pospuesta cita de Unasur
Ecuador anunció este lunes la postergación de una cita de cancilleres de la Unasur en la que debía tratarse la crisis fronteriza y diplomática entre Colombia y Venezuela, reunión que había sido anunciada por Bogotá para este jueves en Quito, sede del organismo sudamericano.
El encuentro «no será el 3 (de septiembre), y lo sabe la presidencia protempore» de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), que ejerce Uruguay, dijo a la prensa Xavier Lasso, canciller ecuatoriano encargado.
El viernes la jefa de la diplomacia colombiana, María Ángela Holguín, anunció para el jueves próximo una cita extraordinaria de cancilleres sudamericanos para tratar la crisis con Venezuela por el cierre de la frontera dispuesto por Caracas hace dos semanas, que derivó en la deportación de 1.100 colombianos.
AFP