El nuevo video musical de Taylor Swift continúa causando polémica. Primero acusaron a la artista de haber expulsado un gas cuando presentó la producción en la alfombra de la reciente entrega de los MTV Video Music Awards. Ahora la diva del pop está en peores aprietos.
Cibernautas, medios y analistas culturales de distintas partes tildan de racista la propuesta audiovisual de la canción «Wildest Dreams», el nuevo éxito de la cantante. La crítica central es que el material lleva el mensaje de una «blanca fantasía colonial» en África, según reseñóNPR (National Public Radio).
La estrella también ha sido señalada por la poca cantidad de personas negras que presenta en su más reciente video, considerando que su trama está situada en África. Por esta razón, el portal The Daily Dot’sopinó que la nueva propuesta de Swift «tiene un gran problema de raza».
Por otro lado, Huffington Post entendió que el video «canaliza el colonialismo salvaje» y encarna «la explotación política de una región y su gente».
Swift seleccionó a África para protagonizar una relato de amor y desamor con un personaje interpretado por el actor Scott Eastwood, hijo de Clint Eastwood. Como parte de la trama, la vocalista da vida a una actriz de Hollywood que se enamora de un compañero durante el rodaje de una película. En el proceso posa entre lujos y con elegancia.
El director del video, Joseph Kahn, dejó claro que no se trata de una propaganda política, sino de una simple historia de amor. Kahn también dirigió las propuestas de los cortes «Blank Space» y «Bad Blood».
Las crítcias han sido reseñadas por medios como CNN, Billboard, Daily Mail y The Guardian, que -incluso- llegaron a cuestionar si se trata del «comienzo del fin» para la estrella juvenil.
No es la primera vez que Swift ha sido acusada de racismo en algunas de sus producciones. Algunas personas, por ejemplo, consideraron que el video de «Shake It Off» perpetúa estereotipos.