La tasa de desempleo fue 5,1% en agosto, llegando a su nivel más bajo desde abril de 2008.
Además de esta tibia ganancia de empleos, los salarios tampoco crecieron mucho en agosto: solo el 2,2$, justo en la línea con las expectativas pero debajo del objetivo de la Reserva Federal de 3,5%.
El crecimiento de los salarios ha estado ausente durante la recuperación de la economía estadounidense después de la recesión, y también es un factor clave en la inflación.