MOSCU. Un tribunal condenó el viernes a cuatro años y medio de reclusión a un opositor ruso por disturbios en una manifestación contra el presidente Vladimir Putin, lo que presagia duras penas para los otros 17 acusados en este proceso judicial, cuya finalidad, según la oposición, es disuadir la contestación popular.
Maxim Luzianin fue condenado por participar en «disturbios masivos» durante una protesta anti-Putin el pasado 6 de mayo, que degeneró en enfrentamientos con la policía, y por «actos violentos contra representantes del poder». La fiscalía había pedido seis años y medio de confinamiento en un campo de prisioneros.
Este treintañero es el primero en ser condenado de las 18 personas acusadas de haber participado en los disturbios, de las cuales 13 se encuentran en detención provisional.
Su condena presagia duras penas para los demás inculpados, sobre todo teniendo en cuenta que fue el único en reconocer su culpabilidad.
El abogado de Luzianin, Serguei Chushpanov, reconoció que su cliente había dañado la dentadura de un policía pero ya había pagado una compensación financiera por ello, según la agencia oficial Itar-Tass.
Pero la investigación dedujo que Luzianin golpeó a policías y simuló estrangular a otro, según Itar Tass.
En la audiencia, Luzianin añadió que sus actos fueron cometidos «bajo el influjo de la emoción» y pidió disculpas por ello. La defensa anunció que recurrirá el veredicto.
«La dureza de este veredicto me chocó. Es una mala señal para los otros», estimó la abogada Anna Savra, que defiende a otro acusado.
AFP