El Nuncio Apostólico, Aldo Giordano, indicó que los pueblos de Colombia y Venezuela son hermanos, tal como lo ha hecho notar el papa Francisco y que, por tal razón, la única manera que tienen de resolver sus diferencias es el diálogo.
Giordano manifestó durante un foro acerca de la encíclica papal “El cuidado de la casa común” que la Iglesia reconoce que hay problemas, pero el método tiene que ser el diálogo.
Destacó que la paz y la reconciliación siempre son posibles.
El Nuncio expresó que los pueblos no merecen la violencia y que siempre para escribir páginas nuevas, se requiere el perdón.
El presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana, monseñor Diego Padrón, expresó que su institución observa con preocupación la situación en la frontera, a pesar de que se trata de un problema con muchos años.
El presidente del Ifedec, Eduardo Fernández, señaló que el último impasse entre Colombia y Venezuela reclama solidaridad, amor y fraternidad y recordó que Simón Bolívar soñaba en una patria que integraba a Colombia y Venezuela.
Fernández exhortó a aprovechar la frontera entre ambas naciones para la fraternidad.