El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, se acercó hoy hasta el paso de Paraguachón, fronterizo con Venezuela y que permanece cerrado desde el pasado lunes por orden de su homólogo, Nicolás Maduro, donde estrechó la mano de varios miembros de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB).
Santos, acompañado por una multitud, caminó por la carretera que une ambos países y, cuando se aproximó a la barricada montada en el lado venezolano un grupo de uniformados de la GNB, se acercó al mandatario, quien respondió estrechando sus manos y retornó por la vía.
Entre los guardias venezolanos que se acercaron a Santos se encontraba uno que portaba un fusil y chaleco antibalas, y mientras tres uniformados estrechaban la mano del presidente colombiano, el resto permanecían en formación detrás.
Paraguachón es el punto de paso fronterizo entre el departamento colombiano de La Guajira y el estado venezolano de Zulia, y hasta allí se trasladó hoy el jefe de Estado con varios de sus ministros para conocer de primera mano la situación de sus compatriotas en esa zona de la frontera norte.
En el camino hacia la barricada, Santos fue aclamado por los ciudadanos de Paraguachón, que le pidieron firmeza en la crisis con Venezuela que comenzó el pasado 19 de agosto cuando Maduro cerró el paso fronterizo entre el departamento de Norte de Santander y el estado venezolano de Táchira.
Posteriormente decretó el estado de excepción en trece ciudades y, el pasado lunes, ordenó el cierre del paso de Paraguachón.
Desde el inicio de la crisis fronteriza entre ambos países al menos 1.482 colombianos han sido expulsados de Venezuela y unos 19.952 más han abandonado el país vecino ante el temor a ser expulsados, según un informe de la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA).
Este fin de semana, la escalada de tensión entre ambos países fue escenario de un nuevo capítulo con dos violaciones del espacio aéreo colombiano en La Guajira, por parte de aviones militares venezolanos. EFE