El papa Francisco aseguró este martes que la iglesia cubana les avisó a los disidentes políticos y sus representantes que no serían recibidos en audiencia durante la visita de 72 horas que realizó al país caribeño.
«Estaba bien claro que yo no iba a dar audiencias, dijo el Papa a periodistas en el vuelo desde Santiago de Cuba a Washington.
«No estaba prevista ninguna audiencia con los disidentes ni con otros», añadió el pontífice, saliendo así al cruce de críticas que recibió por no realizar esas reuniones.
«De la nunciatura se hicieron llamadas telefónicas a algunas personas que están en ese grupo de disidentes y se les comunicó que yo con gusto, cuando llegara a la catedral, los saludaría. Eso sí existió, pero como ninguno se identificó como tal, yo no sé si estaban o no estaban», comentó.
El pontífice recordó que saludó a personas «que estaban en sillas de ruedas, pero ninguno se identificó como disidente».
El papa añadió que inclusive un jefe de Estado (que no identificó) le pidió una reunión, y «se le dijo que no».
Con relación a versiones sobre el arresto de unos 50 disidentes durante su visita, Francisco aseguró que «no tengo noticia de que haya sucedido eso, no tengo ninguna noticia».
De acuerdo con el pontífice, la iglesia cubana intercedió recientemente ante las autoridades para lograr el indulto de miles de personas arrestadas «y continuará haciéndolo».
En tanto, Francisco narró que su conversación con el anciano líder cubano Fidel Castro se centró en la vida de jesuitas famosos y también en cuestiones sobre medio ambiente.
«Hablamos de estas cosas. Mucho hablamos sobre la encíclica ‘Laudato Si’ (dedicada a cuestiones ambientales). Él está muy interesado en el tema de la ecología. El encuentro no fue tan formal sino espontáneo», dijo.
AFP