El ministro de Asuntos Exteriores de Guyana, Carl Greenidge, denunció hoy la presencia «ilegal» de barcos armados de Venezuela en un río que considera parte de su territorio, en un nuevo incidente relacionado con la disputa entre ambos países por la región fronteriza del Esequibo.
«Están enviando -Venezuela- barcos armados al río Coeroeni, que como saben pertenece a las aguas de Guyana. Además de la movilización de tropas y equipo, incluido un lanzamisiles al otro lado de la frontera, hasta lo que tengo entendido han posicionado ilegalmente embarcaciones en aguas de Guyana», denunció Greenidge.
El funcionario dijo en un discurso difundido en radio y televisión que el Gobierno observa los acontecimientos sin saber a qué responde la movilización de tropas de Venezuela.
El presidente de Guyana, David Granger, denunció ayer el aumento «anormal» de las tropas venezolanas junto a la frontera entre los dos países.
Greenidge urgió a todos los guyaneses a «utilizar solamente los puertos legales de entrada y salida de la República Bolivariana de Venezuela si tienen que viajar» y pidió que se mantenga la calma.
El ministro de Asuntos Exteriores dijo que su Gobierno seguirá de cerca todos los acontecimientos y actuará en caso necesario, además de asegurar que la Administración de Granger continuará buscando una forma de resolver de forma legal la disputa fronteriza por el Esequibo.
Greenidge apuntó que la comunidad internacional, incluida Venezuela como parte del grupo G77 de países en vías de desarrollo, ha acordado que las disputas «deben ser solucionadas de manera pacífica», ya que el principio de coexistencia entre Estados es parte de la Carta de la ONU y Guyana permanece comprometida con ese principio.
Según el ministro, Guyana consideraría «todo acto inconsistente con ese principio como una violación del derecho internacional» y que una ruptura de esos principios conllevaría «graves consecuencias».
Granger ha buscado durante las últimas fechas el apoyo de países latinoamericanos con mira a un discurso que tiene previsto pronunciar en la Asamblea General de la ONU el próximo viernes sobre la disputa de Esequibo, que se remonta a hace más de un siglo. EFE