Durante una rueda de prensa en la sede del Ministerio de Planificación, ubicada en Parque Central, Caracas, Menéndez precisó que el ingreso promedio en los hogares en el primer semestre del 2014 era de 10.089 bolívares y ascendió a 13.284 en el segundo semestre
El vicepresidente para Planificación y Conocimiento, Ricardo Menéndez, informó que el ingreso promedio de los hogares venezolanos en el segundo semestre del 2015 es de 23.000 bolívares, lo que significa un aumento de 5.481 bolívares en comparación con los primeros seis meses del año.
Durante una rueda de prensa en la sede del Ministerio de Planificación, ubicada en Parque Central, Caracas, Menéndez precisó que el ingreso promedio en los hogares en el primer semestre del 2014 era de 10.089 bolívares y ascendió a 13.284 en el segundo semestre; mientras que en los primeros seis meses del 2015 se ubicó en 17.519 Bs.
Menéndez destacó que este año el Gobierno nacional ha incrementado 97% el salario mínimo, mientras que la suma total entre salario y tickets de alimentación representa un aumento de 137%, pese a la reducción de 60% de los ingresos del país debido a la caída de los precios del petróleo.
En el lapso de julio a noviembre –destacó Menéndez— el aumento del salario mínimo se ubicó en 67%, luego de que el presidente de la República, Nicolás Maduro, decretara un incremento de 30% a partir del próximo mes.
En ese contexto, Menéndez acotó que este año se ha triplicado el pago por concepto de tickets de alimentación, que se ubicaba en 2.475 bolívares en febrero y se estableció en Bs 6.750, tras ajustar el cálculo de la unidad tributaria de 0,75% a 1,5% con el nuevo aumento salarial.
“Es un incremento de 233% desde el inicio del año hasta el presente, y eso nos permite tener robustez. Mientras algunos pretenden atacar lo que es la capacidad de consumo de la población, pues viene el Gobierno revolucionario respondiendo con protección vinculada al tema de la remuneración, en el caso específico de los alimentos”, explicó.
El ministro sostuvo que el impacto más importante del aumento salarial es que permite que la población tenga más disponibilidad y poder adquisitivo para comprar productos alimenticios de primera necesidad.
“Por eso ustedes ven que hay una diferencia en lo que corresponde directamente al salario y lo que corresponde específicamente al tickets de alimentación. Es decir, se está direccionando hacia un área de combate, hacia un área de guerra, que precisamente ha sido afectar el poder adquisitivo de la población para la adquisición de los bienes de primera necesidad”, acotó.
Por otra parte, Menéndez reiteró que la inflación en Venezuela es inducida y no obedece a ningún parámetro de racionalidad económica. En ese sentido, ejemplificó que, en el caso de la producción de arena lavada, se incrementó siete veces su precio pese a no necesitar componentes importados que ameriten la utilización de divisas.
Vía Noticias24