El vicepresidente estadounidense, Joe Biden, anunció este miércoles que no se presentará a la carrera presidencial por la Casa Blanca de 2016, quitando un potencial obstáculo a la favorita del Partido Demócrata, Hillary Clinton.
«Creo que nos quedamos sin tiempo, el tiempo necesario para montar una campaña ganadora por la nominación» del candidato demócrata a la presidencia, dijo Biden en el rosaleda de la Casa Blanca junto a su esposa, Jill, y al presidente Barack Obama.
«Pese a que no seré candidato, hablaré con claridad y contundencia sobre dónde nos posicionamos como partido y hacia dónde necesitamos avanzar como nación», agregó.
De 72 años, Biden dijo que su familia aún estaba de luto por la muerte de su hijo Beau, quien falleció a causa de un tumor cerebral en mayo, en tanto hizo una apasionada petición para que haya más investigación y financiamiento para acabar con el cáncer.
«Beau es nuestra inspiración», dijo Biden, quien agregó que mientras su familia trataba de superar el proceso de duelo, se había agotado el tiempo para montar una campaña presidencial viable.
«Encontramos nuestros objetivos en la vida pública», señaló, al tiempo que realizó una vigorosa defensa de los logros de la gestión de Obama e instó a demócratas y republicanos a trabajar juntos.
«Nuestra nación cometerá un trágico error si nos alejamos o intentamos deshacer el legado de Obama. El pueblo estadounidense ha trabajado demasiado duro y hemos llegado demasiado lejos para hacer eso», señaló.
«Los demócratas no solo deben defender y proteger este legado, sino montarse sobre él», agregó Biden, en un comentario que algunos consideraron como un dardo para Clinton, quien se ha pronunciado en contra un tratado de libre comercio con el Pacífico que no obstante había apoyado mientras era secretaria de Estado durante el primer mandato de Obama.
Asimismo, Biden urgió a demócratas y republicanos a «terminar con la política de división partidaria que está desgarrando al país», pues ello «es de espíritu miserable y mezquino y se ha prolongado durante demasiado tiempo».
«No creo que debamos considerar a los republicanos como nuestros enemigos. Son la oposición. No son nuestros enemigos. Y por el bien del país, debemos trabajar juntos», sentenció.
Via AFP