Los dos venezolanos imputados por delitos de narcotráfico en EE.UU., se enfrentarán a cargos por los que la pena máxima es la cadena perpetua, informó hoy en un comunicado el fiscal del caso, Preet Bharara.
«La pena en el escrito de imputación conlleva como máximo una condena de cadena perpetua», recordó Bharara sobre lo previsto en el Código Penal aprobado por el Congreso estadounidense.
Efraín Antonio Campo Flores, ahijado del mandatario venezolano, y Francisco Flores de Freitas, sobrino suyo, fueron imputados hoy por conspirar para introducir cocaína en Estados Unidos.
Ambos deberán comparecer recordó Bharara «en el día de hoy» ante el magistrado designado para el caso, James L.Cott.
Según la Fiscalía, ambos participaron en varios encuentros durante el mes de octubre para organizar el envío de un cargamento de cinco kilos de cocaína a través de Honduras.
Tras ser detenidos esta semana en Puerto Príncipe (Haití) y entregados a las autoridades estadounidenses, está previsto que los dos acusados comparezcan hoy por primera vez en el juzgado federal de Manhattan, informó la Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York.
Por ahora, los dos jóvenes están acusados formalmente de un cargo de narcotráfico, según la imputación aprobada por un gran jurado de Nueva York, un primer paso habitual en muchos procedimientos judiciales en Estados Unidos.
Según ese documento, hecho público hoy, Campo Flores y Flores de Freitas conspiraron junto a otras personas para introducir en el país al menos cinco kilos de droga.
El texto, que no da muchos detalles, señala que los dos participaron en reuniones en Venezuela durante octubre relacionadas con el envío de la cocaína a Estados Unidos. EFE