El presidente de la Cámara venezolana de la Construcción, Jaime Gómez, sostuvo que las regulaciones del precio de venta máximo en las viviendas ha generado que a la clase media venezolana le sea imposible adquirir una vivienda.
En una entrevista ofrecida a Unión Radio, Gómez sostuvo que construir en la Gran Caracas para la clase media es imposible porque los costos de los terrenos no lo permitirían.
“El poder adquisitivo de las personas se perdió, el precio mínimo de un apartamento en Caracas con ascensores estaría no menos de 10 millones de bolívares, para cancelar un crédito de 6 millones de bolívares debes tener un sueldo de 200 mil bolívares y nadie gana eso en la actualidad”.
Indicó que la regulación de las viviendas fijada en el mes de enero del año 2015, puso el tope de venta máximo de un millón setecientos mil bolívares en la Gran Caracas y para el interior se fijó para 740 mil bolívares. “Con 740 mil bolívares no se puede hacer el urbanismo de un proyecto y el sector privado no puede involucrarse y esto genera la escasez de viviendas y el que más paga es la clase media“.
Para Gómez dicha resolución ha traído que el sector privado no participe y automáticamente se pierdan 400 mil empleos, y en ese sentido, exhortó al gobierno a trabajar en conjunto. “Es una situación desesperante, nosotros estamos en contra que no exista igualdad de condiciones para los empresarios venezolanos, estamos perdiendo todo el parque de maquinarias”.
El representante gremial lamentó la caída del producto interno bruto que se ubicó este trimestre en 25%. “Tenemos que llegar a un acuerdo definitivamente y solventar esta coyuntura de inmediato”.