El haber intentado defender a un adolescente de las agresiones de un sujeto, le costó la vida al atleta paralímpico Ronny Jesús Guerrero Rengel, de 20 años. La madrugada del sábado, compartía con unos amigos en el sector Las Casitas, kilómetro 21 de Filas de Mariches, cuando un sujeto le dio un tiro en el tórax.
Guerrero estaba en su silla de ruedas en la cancha donde se reunieron varios conocidos, cuando el homicida que llegó al sitio, le dio una cachetada a un muchacho que de 17 años que estaba en el lugar. El atleta le reclamó y el sujeto sacó una pistola con la que le dio el tiro.
Ronny Guerrero murió cuando atendido en el hospital Domingo Luciani, en El Llanito, mientras que el asesino huyó. El deportista tenía una hija de 9 años. Desde niño practicó el baloncesto pero hace tres años sufrió un accidente vial con una moto y le amputaron la pierna izquierda.
Su hermana Carolina Guerrero, contó que el muchacho no se detuvo a pesar de esa tragedia y tras recuperarse viajó a Coro, estado Falcón, donde in entrenador lo tomó y lo ayudó a entrenar a pesar de su discapacidad.
Antes del accidente formó parte de la Selección de Basquet del estado Miranda. Cuando le amputaron la pierna comenzó a jugar con equipos paralímpicos en varios estados hasta que lo firmaron con la selección nacional.
En enero próximo viajaría a España para representar al país en un campeonato internacional.
“El 14 de enero se iba para Europa. Mi hermano fue ejemplo de superación para juventud de no dejarse vencer por las dificultades. Siempre luchó para seguir en las canchas aunque le faltara su pierna. Jugaba con su silla de ruedas. Hace poco le dieron su nuevo uniforme de Venezuela. Ahora tengo que ponérselo para enterrarlo”, contó.
AA