El sitio de producción de armas atómicas más contaminado de Estados Unidos es ahora un nuevo parque nacional.
Se espera que miles de personas visiten el año entrante la Reserva Nuclear Hanford, que alojó al primer reactor nuclear completo en el mundo, a 322 kilómetros (200 millas) al este de Seattle.
Sin embargo, no se permitirá a los visitantes acercarse al lugar donde se recolectan los desperdicios tóxicos y radiactivos.
«Todo está saneado y es perfectamente seguro», dijo Colleen French, directora del programa para el parque Hanford, del Departamento de Energía de Estados Unidos. «Cualquier material radiactivo se encuentra a kilómetros (millas) de distancia».
El Parque Histórico Nacional del Proyecto Manhattan, cuya existencia fue promulgada en noviembre, también incluye lugares en Oak Ridge, Tennessee, y Los Alamos, New Mexico. El Proyecto Manhattan es el nombre del programa con el que Estados Unidos construyó la bomba atómica durante la Segunda Guerra Mundial.
En Hanford, las atracciones principales serán el Reactor B —el primero de tamaño real construido en el mundo— y los pueblos fantasma de Hanford y White Bluffs, que fueron evacuados por el gobierno a fin de crear espacio para el Proyecto Manhattan.
El Reactor B fue construido más o menos en un año y produjo el plutonio para la prueba nuclear Trinity efectuada en New Mexico y para la bomba atómica lanzada sobre Nagasaki, Japón, que propició la rendición japonesa.
A partir de 1943, más de 50.000 personas de diversas partes de Estados Unidos llegaron al sitio secreto de Hanford para efectuar labores cuyo propósito era conocido sólo por unos cuantos, dijo French.
Los 300 habitantes de Richland fueron desalojados y la localidad se convirtió en una comunidad dormitorio para el sitio contiguo de Hanford.