A bordo de cuatro autobuses, los agotados antillanos cruzaron la frontera de Guatemala con Ciudad Hidalgo, en Chiapas, en el sureste de México, arrastrando sus maletas en el camino a la oficina de migración
Unos 180 migrantes cubanos, de los casi 8.000 que están varados en Costa Rica desde noviembre, llegaron el miércoles a México en autobús en el marco de un acuerdo trinacional para ayudarlos a llegar a Estados Unidos.
Agentes migratorios tienen la orden de proporcionarles una visa de 20 días para llegar a Estados Unidos, donde está vigente la política de «pies secos/pies mojados», que permite a los cubanos que huyen de su país quedarse legalmente una vez que pisen territorio estadounidense.
Los cubanos llegaron a Ciudad Hidalgo bajo el programa piloto entre Costa Rica, El Salvador y Guatemala que podría extenderse a otros 7.600 isleños que continúan varados en territorio costarricense debido a que su país vecino, Nicaragua, se niega a dejarlos pasar.
«Ya nos dieron un salvoconducto. Podemos estar libres por 20 días y llegar rápido a Estados Unidos», se alegró Yumiley Díaz Riva, una oficinista de 21 años que estuvo dos meses varada en Costa Rica con su marido y dejó a su bebé de un año en la isla.
espués de conseguir su permiso, cansados, los casi 200 cubanos esperaron los buses que la Organización Internacional por las Migraciones (OIM) les había facilitado para trasladarlos gratuitamente hasta Tapachula, donde podrán quedarse en albergues para migrantes o tomar autobuses hacia la ciudad que deseen.
Los 109 hombres y 71 mujeres salieron de Costa Rica en avión a El Salvador, donde fueron embarcados en los autobuses a la frontera de Guatemala con México, un viaje de 13 horas organizado por la OIM.
El martes, antes de abordar el avión en el aeropuerto de Liberia, a 200 km al norte de San José, los viajeros se despidieron emocionados de sus compatriotas, con los que compartieron albergues en la ciudad vecina de La Cruz, de donde se fueron entre aplausos, abrazos y lágrimas.
Entusiasmo y temor
«El Gobierno de Costa Rica confía en el éxito de este plan piloto», señaló Manuel González, canciller de Costa Rica.
Tras la decisión nicaragüense de cerrar el paso a los cubanos, 7.800 migrantes quedaron varados en Costa Rica y otros 2.000 se encuentran en Panamá.
La directora de Migración de Costa Rica, Katia Rodríguez, consideró que podrían requerirse unos 28 vuelos para evacuar a los cubanos radicados en 38 albergues en su país.
Marie-Pia Rieublanc / AFP