El presidente de Fedenaga, Carlos Odoardo Albornoz, afirma que cualquier medida que tome el Gobierno pasa primero por reintegrar la confianza de los productores y tomar la producción nacional como prioridad antes que las importaciones.
“Tenemos que apostar a lo nacional, medidas que vayan en función de lo que se produce en Venezuela, crear equipos y maquinarias con las empresas metalmecánicas. Plan de siembra de soya -que ahora se importa en 99%- para el tema proteíco. El tema de la sequía, seguridad jurídica y personal. Un violento plan de maquinarias para encender a Venezuela destruida en todos los campos y ruralidad del país”.
Para Albornoz hay que reconocer el potencial de las tierras venezolanas. “Somos la tercera mejor opción en Latinoamérica para producir alimentos en 37 millones de hectáreas con vocación agropecuaria; una potencia gigante con un conjunto de políticas públicas que no están diseñadas para fomentar la producción nacional”.
Su posición sobre la liberación de precios de carne y leche, Albornoz, pide que se tome en consideración la situación económica de los venezolanos en las mesas de trabajo y que se alcance un acuerdo nacional. “No bastan reuniones esporádicas y aisladas”, expresó.
Explicó que Venezuela tiene uno de los precios más bajos de los productos cárnicos pero se ven superados por la inflación. “Tenemos la carne más barata de Latinoamérica pero lamentablemente los consumidores no tienen para comprarla”, comentó.
Aseguró que el consumo ha caído de forma dramática; “en las clases D y E el consumo de carne per cápita ha caído a menos de un kilo por mes”.
Hace poco el sector mantuvo una breve conversación con el ministro de Agricultura, Willmar Castro Soteldo, para proponerle buscar un acuerdo nacional. Aún así, Albornoz, desestima la afirmación del titular de Agricultura que dice que en sesenta días habrá resultados porque no cree que haya condiciones.