Luego del crimen el Cicpc detuvo al homicida, Derwin Rondó, quien pretendía asesinar a su esposa
Una cuchillada en el corazón, acabó con la vida de Carlos José Veliz Nieves (50), carpintero que salió de defensa de una de sus hijas, al enterarse que era agredida por su ex pareja, en la parte alta del barrio San José, en Petare.
La noche de este domingo, Veliz estaba en su casa con su esposa cuando una de sus hijas lo llamó por teléfono pidiéndole ayuda porque el sujeto llegó a la vivienda donde estaban reunidas haciendo una sopa y había arremetido contra su hermana.
Luisa Cueto, su esposa, estaba lavando cuando lo vió salir y le preguntó adonde iba, a lo que él respondió diciendo que en busca de sus hijas, pero no le explicó de qué se trataba. “Cuando me llamaron que le habían dado una puñalada bajé y estaba tirado. Lo llevamos a hospital de El Llanito, pero de pronto me miró con ternura, cerró sus ojos y murió”, relató.
Dijo que su esposo llegó al lugar cuando el homicida, de nombre Derwin Rondón, estaba golpeando a su hija. Luego sacó un cuchillo para matarla, pero Carlos José se interpuso y recibió la cuchillada en el pecho, a nivel del corazón.
Más tarde, comisiones del Cicpc capturaron al delincuente que según la mujer, estaba merodeando la casa porque su objetivo era asesinar a su hija. Contó que la joven lo dejó, después de 7 años de relación porque era un hombre muy violento. “El no quería aceptarlo y ya la había amenazado”, dijo.
Carlos José Veliz era carpintero, padre de cuatro hijos y dejó cinco nieto. “Teníamos toda una vida juntos. Con 36 años de casados”, agregó.
AA