El actual campeón del mundo venció a la selección de Panamá por 5-1 en amistoso
La selección española terminó ayer su campaña del 2012 sin perder en los dieciséis partidos que jugó y con una goleada por 1-5 a la de Panamá en un encuentro amistoso en el que los pupilos de Vicente Del Bosque dieron un concierto de buen fútbol y demostraron porqué son los campeones del mundo.
España, liderada por Andrés Iniesta, resultó inmensamente superior a Panamá en el terreno de juego desde el primer minuto, con rotaciones del balón entre todas sus líneas y la toma de espacios sin mucha oposición.
Mientras, los panameños, encerrados en su campo, intentaban quitarles el esférico, lo que solo ocurrió en los primeros minutos de juego.
Iniesta, Pedro y Villa fueron hilvanando las jugadas ofensivas de la selección española desde el centro del campo y en quince minutos de juego minaron la resistencia panameña.
El primer gol llegó a los 15 minuto tras una maniobra tejida entre Iniesta y Pedro, quien coronó con un tiro rasante en diagonal que se coló lejos de las manos de Jaime Penedo, el mejor jugador panameño del partido.
Mata por la banda derecha puso en evidencia las carencias defensivas panameñas e incluso al minuto 28 desperdició una oportunidad de anotar.
Pero a los pocos segundos Iniesta tomó un balón por el callejón derecho, se sacó de encima a cuatro jugadores y puso el esférico al centro del área, donde ‘el guaje’ Villa, con un toque sutil que sobró a la defensa, luego sometió sin problemas a Penedo con un remate al centro.
Al minuto 42 Pedro y Villa, siempre por la derecha, se asociaron y tomaron mal parada a la defensa panameña y a Penedo. Pedro firmó el segundo gol y 0-3 de su equipo, resultado con el que las selecciones se fueron al descanso.
Para el segundo tiempo el planteamiento siguió igual, España con su habitual toque de balón y triangulaciones constantes, mientras el 4-4-2 de Panamá hacía agua por el repliegue y desarticulación de sus centrocampistas.
Penedo se erigió como el mejor jugador de Panamá porque salvó a su portería de caer, por lo menos, seis veces ante los remates de Fabregas, Navas, Soldado y Susaeta, incluso alguno a bocajarro.
La entrada de Iker Casillas en sustitución de Valdés provocó una algarabía entre las centenares de aficionadas que ocupaban los graderíos del estadio nacional, aunque hasta el final el cancerbero madridista tuvo poco trabajo.
Sobre los últimos diez minutos, Sergio Ramos marcó un soberbio gol de falta que entró por el ángulo izquierdo de Penedo, un disparo a más de 30 metros de distancia que pasó sobre la barrera y el portero solo pudo ver entrar el balón.
Dos minutos después, el debutante Susaeta marcó el 0-5 con un tiro dentro del área sin atenuantes ni culpa para el portero panameño.
La única anotación de Panamá la izo Gabriel Gómez, cuando al minuto 86 ejecutó un penalti a lo Panenka.
Fábregas derribó a Barahona en el área y Casillas resultó burlado con el remate de efecto, suave y bien colocado al centro del pórtico.