Ante la prensa y el jurado, Fernando Hernández Leyva, alías “Pancho López”, confesó 100 homicidios y seis secuestros
Se sospecha que el número real de víctimas de Fernando Hernández Leyva, mejor conocido como “Pancho López”, asciende a mil 372, lo que lo convertiría en uno de los asesinos seriales más prolíficos de la historia de México, sin embargo, durante su juicio sólo confesó 100 asesinatos.
Pancho López fue condenado en 1986, por 33 cargos de homicidio cometidos en cinco estados distintos de la unión mexicana. Fue considerado por los expertos en psicología criminal, un asesino organizado, nómada y hedonista motivado por interés.
Legado homicida
Este aberrante sujeto nació en 1954, en Cuernavaca, México, pero poco se sabe sobre su infancia, así como también se desconoce quiénes fueron sus padres y bajo cuáles condiciones de vida creció. Carece de estudios universitarios y durante su vida fue laboralmente inestable.
La carencia de información sobre sus primeros años de vida, hizo que fuese sumamente difícil para los investigadores policiales, conocer o asegurar los motivos que desarrollaron el comportamiento violento de Hernández Leyva, que lo llevó a cometer la innumerable cantidad de homicidios y los seis secuestros que reconoció públicamente.
La delincuencia y la criminalidad siempre fueron parte de su vida, por lo que, durante un período de 13 años, fue arrestado en dos ocasiones, logrando escapar ambas veces de prisión. En abril de 1999 fue apresado de nuevo, pero esta vez no trató de escapar, si no que decidió suicidarse, ahorcándose en su celda.
Las intenciones suicidas de Pancho López se vieron frustradas cuando la cuerda que utilizó se rompió, ya que era un hombre muy pesado (150 kilos). Como resultado de este evento, sufrió algunas lesiones menores en el cuello y se le practicó un examen psicológico que llevó a la conclusión de que era un psicópata que asesinó por satisfacción personal.
Cuando las autoridades mexicanas informaron a la prensa que habían detenido a un sujeto que afirmaba haber matado a más de 100 personas, muchos dudaron que esto fuese cierto, ya que no se tenía registro de la mayor parte de dichos crímenes. Poco a poco, sin embargo, fue surgiendo la verdad y se confirmaron, por lo menos, 33 asesinatos.
Hernández Leyva había sido capturado por primer vez en 1982 debido a su relación con algunos crímenes, sin embargo, había escapado de custodia. Cuatro años después, en 1986, fue recapturado y desde esa fecha no ha vuelto a salir de prisión.
Un Hernández Leyva ya esposado y sin ninguna muestra de arrepentimiento, apareció ante las cámaras de televisión de México y confesó haber matado a más de 100 personas y secuestrado a seis. Según sus propias palabras, los crímenes fueron cometidos en cinco estados diferentes de México.
Poco después, comenzó el juicio en contra de Hernández Leyva. Se le acusó, junto con tres cómplices, de varios cargos de robo y secuestro, además de los 137 asesinatos que terminaron imputándosele. Los crímenes, según las autoridades, fueron cometidos a lo largo de varios años en los estados de Morelos, Jalisco, Colima, Guanajuato y Michoacán.
Poco después, sin embargo, el acusado habría de retractarse de sus confesiones y aunque admitió haber raptado a un periodista y matado a un oficial de policía, dijo que los agentes judiciales lo habían golpeado para que confesara y que además lo amenazaron con violar a su esposa si no se declaraba culpable de los crímenes. Las autoridades, por su parte, no hicieron ningún comentario acerca de las declaraciones de Hernández Leyva.
Cuando Pancho López fue transferido a una penitenciaría del estado de Morelos, hubo protestas públicas de personas que querían hacer justicia por su propia mano e insistían en que los dejaran lincharlo, “queremos su sangre”, gritaban. El criminal fue puesto en máxima vigilancia, pues tenía antecedentes de haber escapado de prisión en dos ocasiones anteriores.
El fiscal del caso para la fecha, José Leonardo Castillo Pombo, manifestó que, a pocos días de haberse iniciado las investigaciones, el conteo de muertes que se le achacaban a Hernández Leyva comenzó a crecer de manera alarmante, hasta llegar a las 137 que, finalmente, le fueron imputadas.
Poco más se sabe del caso de Fernando Hernández Leyva. Actualmente, se encuentra en el reclusorio de máxima seguridad La Palma, ubicado en Ciudad Juárez en México y si cumple su condena completa, saldrá libre en el 2049, a los 84 años de edad.
Gran curiosidad
Los cuerpos policiales y la prensa de México en general tenían una gran curiosidad por conocer los motivos que llevaron a Fernando Hernández Leyva, alías Pacho López a cometer esta aterrorizante cantidad de homicidios. La respuesta del criminal fue clara y sencilla: “los maté porque tenía que hacerlo. No sé hacer otra cosa”.
Edda Pujadas
@epujadas