Esta temporada alta, de la Semana Mayor, para el turismo margariteño ha sido todo un fiasco a pesar de los esfuerzos que el sector turismo y comercial realizaron, el sector hotelero, con menos del 40% de ocupación, cifras esta históricas ya que en periodo iguale, la ocupación hotelera ronda por el 80% hasta 90%..
La causa son por demás conocida, la falta de agua, la falta de luz, el desabastecimiento, la escasez, la especulación, los altos costos en los boletos aéreo, y la inseguridad, hicieron posible que habituales visitantes a la bella Isla, decidieron en esta Semana Santa no viajar a ese paradisiaco destino.
Desde hace meses el sector comercio, el sector turismo, los ciudadanos, los medios de comunicación social, ha vendió denunciando esas fallas, y el gobierno regional, como siempre pura promesas incumplidas, ha logrado que la temporada hay sido la peor de muchos años.
No han sido las campañas de Face Book, y de las redes sociales, quienes han creado esa crisis, pues nadie va a un destino turístico a pasar malos ratos, si hay que declara culpables, estos tiene nombre y apellido: Gobernación del Estado Nueva Esparta, CORPOELEC, HIDROCARIBE, CONFERRY, quienes por su falta de eficiencia hicieron de esta Semana Mayor una tragada, para el sector hotelero, comercial e informal.
La semana pasada, el Gobernador del Estado, con un ridículo cartoncito, en rueda de prensa informo 4 mil millones de bolívares en obras para el estado, la pregunta periodística es ¿Por qué ahora y no cuando los debía hacer?, cuando ya el mal está hecho.
Para que el destino Margarita se recupere de la actual crisis, se deben tomar acciones inexorables: Activación activa y Motor productivo del Puerto Libre, planificación y ejecución de obras y manteamiento para el acueducto, para el sistema eléctrico; actuar con una Política Pública real contra la inseguridad, sin demagogia y populismo