El rey de España sostendrá el lunes y martes consultas con los partidos políticos del país después de cuatro meses de parálisis política en un último intento para instalar un gobierno y evitar nuevas elecciones.
Los comicios nacionales de diciembre pasado tuvieron un desenlace histórico porque pusieron fin al sistema bipartidista tradicional del país con el fuerte avance de dos fuerzas políticas nuevas que se beneficiaron del enojo del electorado ante el aumento del desempleo, la corrupción y los recortes derivados de la austeridad.
Sin embargo, el resultado acarreó un estancamiento político porque ningún partido obtuvo la mayoría de bancas en la cámara baja de 350 miembros. A pesar de sus intentos, los partidos no han logrado consenso para integrar un gobierno.