Unas 15 personas ingresaron a una vivienda en el barrio El Onoto de Caricuao, donde vivía Rosnaldi Matheus (21) y le quitaron la vida a golpes, tubazos y machetazos. El hombre fue linchado presuntamente por haber cometido varios robos y hurtos en residencias
Eran las 3:00 de la madrugada del sábado. En casa estaba su madre, su hermano menor que tiene autismo, su padrastro y una hermana de este. Las personas tocaron a la puerta pero no les dieron oportunidad de diálogo.
Como no les abrían, reventaron la cerradura de una reja y avanzaron hacia la parte interna. El joven corrió de su habitación a la de su madre para esconderse debajo de una cama pero de allí lo sacaron.
Sus parientes contaron que le dieron una paliza y lo arrastraron hacia la calle, donde nuevamente le cayeron a tubazos, destrozándole la cara. Tuvo pérdida de masa encefálica y murió en el lugar, frente a su familia.
A su madre, le dieron golpes en los brazos cuando trató de meterse para protegerlo. Este lunes la mujer estaba en la morgue de Bello Monte, donde le practicaban exámenes médicos legales para poder hacer la denuncia.
Máxima Brito, tía de la víctima, dijo que probablemente su sobrino estaba en malos pasos pero cuestionó la manera en que fue asesinado. “Las autoridades deben tomar cartas en el asunto porque el hecho de que una persona esté haciendo las cosas mal, no implica que la comunidad tenga la potestad de asesinarla de esa forma, golpeando a su madre que es una paciente renal”, afirmó.
Matheus vendía zapatos en un puesto en el mercado de La Hoyada. Era el segundo de tres hermanos y dejó un hijo. CD
YM