La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela establece en sus artículos 20 y 21 que “todas las personas tienen derecho al libre desenvolvimiento de su personalidad”. Asimismo, aclara que para garantizar las condiciones de igualdad, de derechos y libertades de toda persona “no se permitirán discriminaciones fundadas en la raza, el sexo, el credo o la condición social”
Sin embargo, hasta la fecha, el gobierno venezolano no ha implementado leyes o instrumentos jurídicos que protejan íntegramente a las personas por su orientación sexual e identidad de género; es decir, las personas homosexuales, transexuales y bisexuales no poseen los mismos derechos y protecciones legales disponibles para el resto de los ciudadanos.
Tamara Adrián, diputada a la Asamblea Nacional, señaló que Venezuela es el único país de Latinoamérica en donde no hay respeto a las minorías sexuales y muestra de ello han sido las políticas opuestas a la defensa de derechos igualitarios: “¿Estamos acaso menos preparados que otros países de América Latina? Es necesario que todo el mundo entienda que cada época te obliga a superar tus perjuicios”.
Con respecto al estatus legal de los transexuales en Venezuela, la diputada y activista defensora de los derechos de la comunidad sexodiversa aseguró que la situación de las “personas trans” es dramática porque carecen de una identidad legal que corresponda a su físico. “Estas personas quedan excluidas del sistema social, carentes de educación y de la posibilidad de tener una vivienda o trabajo digno”, expresó.
La primera diputada transgénero ha solicitado en diferentes oportunidades cambiar de sexo legalmente, solicitud que aún no le ha sido concedida. Incluso, le han impedido comprar alimentos regulados porque su cédula no coincide con su género.
Adrián aseguró que hoy en día cambiarse de sexo no es una condición necesaria, las personas trans buscan tener una identidad clara frente a la población, estado de derecho y aspectos morales.
Puntualizó que la lucha por la defensa de los derechos LGBT es un combate que incluye a todos los sectores de la sociedad: “Las alianzas son importantes y el convencerse que tienes que acompañar la lucha por la igualdad es esencial; no tienes que ser de piel oscura para combatir contra el racismo o ser mujer para luchar en contra del sexismo”.
La diputada afirmó que el matrimonio igualitario es un tema que debe ser discutido; sin embargo, el Tribunal Supremo de Justicia dictó una sentencia en 2008 que establece al matrimonio como una institución heterosexual y la Asamblea Nacional no puede legislar sobre ello. EN
YM