A las 7 de la mañana los vecinos del sector Cañicito, parte alta de El Valle, escucharon el llanto de un niño proveniente de la casa de Yormis Moreno Vargas de 32 años. La puerta estaba cerrada, ingresaron por una ventana y encontraron en el cuarto el cadáver del expolicía
Un joven a quien el escolta Yormis Antonio Moreno Vargas (32) le dio alojamiento en su casa hace seis meses, es buscado por las autoridades como principal sospechoso en el asesinato del guardaespaldas que trabajaba con el equipo de seguridad del diputado Luis Florido.
El sábado a las 7 de la mañana los vecinos del sector Cañicito, parte alta de El Valle, escucharon el llanto de un niño proveniente de la casa de Moreno Vargas. La puerta estaba cerrada, ingresaron por una ventana y encontraron en el cuarto el cadáver del expolicía con tres disparos en el rostro. Al lado estaba su hijito de 2 dos años, con las manitas ensangrentadas y lo observaba.
Un vecino comentó que a las 3:15 de la madrugada vio salir del inmueble a un joven de aproximadamente 18 años, conocido como Wilkerman Colmenares, a quien Moreno le dio alojamiento hace seis meses porque no tenía dónde dormir y estaba buscándole un trabajo.
La casa estaba en completo desorden, desaparecieron la pistola, prendas, celulares, reloj, demás objetos de valor y el dinero que Moreno estaba reuniendo para comprar un carro cuando vendiera su moto.
Otros dos hombres habrían participado en el crimen junto con Colmenares. Sospechan que el les abrió la puerta porque no hay violencia en la entrada y se llevaron las llaves.
Gloria Peña, suegra del escolta, estaba consternada.
–En seis meses he perdido a tres seres queridos por culpa de esta inseguridad, dijo.
Ella es subsecretaria de organización de Primero Justicia en la parroquia Santa Rosalía.
A su hijo, Said Javier Peña Peña (27), oficial de la PNB, lo mataron el 24 de diciembre del año pasado cuando atacaron el módulo de San Agustín del Sur. Una sobrina murió hace un mes “y ahora mi yerno. Hasta cuándo tanta impunidad, todavía estoy esperando una respuesta por el crimen de mi hijo”.
Yormis Moreno trabajó en la Policía de Baruta hasta hace seis años y después se dedicó a la actividad privada.
El viernes en la noche compartió con familiares en la casa de la suegra, y a la 1:00 am del sábado subió a dormir con su pequeño hijo. Estaba separado de la esposa.
La señora Peña refiere que Yormis era muy generoso, colaboró dándole alojamiento al muchacho porque el también había pasado serias dificultades desde niño. Era huérfano de padre y madre.
-Siempre me decía que había que ayudar a la gente necesitada.
En bolsa hallan cuerpo
descuartizado de hombre
El cuerpo desmembrado de Hugo Alberto Buitriago (29) fue localizado dentro de una bolsa negra, de colectar basura, en la entrada de La Vega, suroeste de Caracas.
Buitriago era albañil, vivía en el urbanismo de la Misión Vivienda Cacique Tiuna, en La Rinconada, con su pareja y su hijo de 7 años; y dejó una niña de 8 años, producto de su relación anterior.
El jueves al caer la tarde lo llevaron hasta la calle 18 de Los Jardines del Valle, parte alta, cerca del llenado de gas, donde le dieron 15 tiros y luego lo descuartizaron. Le cortaron la cabeza, brazos, piernas, orejas, etc.
Sus familiares están aterrorizados.
Este fin de semana fueron ingresados 33 cuerpos a la morgue de Bello Monte, 13 el sábado y 20 el domingo.
Muere “ruleteado”
sin recibir asistencia
Después de haber sido ruleteado por varios centros de salud sin recibir asistencia por falta de recursos, en el hospital del Llanito murió Yorman González (25), quien recibió un tiro en el abdomen el jueves en la noche cuando se encontraba cerca de su residencia en el sector Marizapa, Caucagua, municipio Acevedo del estado Miranda.
Un vecino lo llevó en su carro al hospital de Caucagua, luego al hospital de Guatire, después al del Seguro Social de Guarenas y de allí lo trajeron en ambulancia al Llanito.
Yorman falleció por un infarto mientras lo operaban al filo de la media noche del jueves y ayer domingo a las 10 de la mañana sus parientes esperaban que lo trasladaran a la morgue. En el centro de salud alegaban que no había morguero para expedir la orden de salida.