Qué triste es querer aferrarse al poder y ampararse en los filos de las bayonetas para mantenerlo
Recientemente leí un Twitter enviado por Macky Arenas con una reflexión muy profunda del expresidente de la república Rafael Caldera Rodríguez y que según nuestro criterio hoy está más actual que nunca y que habla de los militares: “Los dictadores de hoy, que pretenden hacer del Ejército una máquina que no sienta ni oiga, ni vea, un autómata, un robot en sus manos, dispuesto a cometer todos los atropellos; los dictadores no entienden que los militares son hombres que callan por jerarquía y disciplina militar, pero que oyen, porque no pueden menos que oír el latido del corazón del pueblo; son hombres que tienen amigos y tarde o temprano tienen que reflejar el sentimiento que domina la nación”.
Hemos querido engalanar nuestro espacio de opinión con esta clara cavilación de uno de los hombres más preclaros de nuestra nación en toda su historia republicana, quien tuvo el honor de haber sido presidente en dos oportunidades y que cada día que pasa su calidad humana e intelectual crece en el corazón de los venezolanos. Nos referimos al doctor Rafael Caldera Rodríguez. La actualidad moral le permite, aunque ya no esté con nosotros, hacer referencias a puntos de mucha relevancia y sobre todo sobre un tema que para él fue harto conocido y que con su actuación se ganó el respeto de todos los militares en la trayectoria de su siempre ascendente vida política, de maestro de varias generaciones, de inmaculado esposo y amantísimo padre y de haberse convertido en un ciudadano ejemplar, aspectos reconocidos a nivel mundial de su personalidad, entre otros.
Después de leer lo expresado por el doctor Caldera nos hacemos la siguiente pregunta: ¿qué pensarán los actuales militares de los gobernantes que hoy rigen en el país, especialmente aquellos hombres que forman la parte integral, principalmente sus líderes y sus intelectuales, que los hay en demasía dentro de los cuarteles venezolanos? Qué triste es querer aferrarse al poder y ampararse en los filos de las bayonetas para mantenerlo. Creemos de todo corazón que nuestra amada Venezuela ha sido mancillada y deshonrada por esos supuestos defensores de una revolución que no existe, una guerra económica de mentiras y de engaños, de atentados contra el que hoy ejerce la presidencia de Venezuela y que fue designado por el Consejo Nacional Electoral, algo tan quijotesco como las severas luchas de Don Quijote contra los molinos de viento.
Afortunadamente, los venezolanos estamos más unidos y claros que nunca y sabemos que el camino que nos señala el actual régimen es el camino equivocado, ya que con sus improvisaciones y su falta de criterio nos están llevado al precipicio. Pero ya el venezolano de los barrios se dio cuenta del error cometido en estos últimos 17 años de fracasos y de mal vivir.
Y es por ello que hoy trajimos la reflexión del doctor Rafael Caldera y tenemos fe y confianza que nuestras Fuerzas Armadas también defenderán el honor de sus hijos y no permitirán un fraude y mucho menos una violación a la Constitución Bolivariana de Venezuela como lo sería no llevar a cabo el Referendo Revocatorio este año. Pensamos que los dignos militares de nuestra patria están viendo y analizando las injusticias que se comenten contra nuestros presos políticos y lo que es peor aún, las muertes que se viven en la actualidad por la delincuencia desatada en todos los rincones de nuestra patria, la falta de medicamentos y atención hospitalaria y el ver morir a niños en los hospitales por no tener insumos para salvarlos… Maduro, por el bien de Venezuela renuncia.
Salomón Benshimol R.
sbenshimol@yahoo.com