Los grupos sociales digitales se han organizado de tal forma, que mantienen a contactos y seguidores al tanto de precios y ofertas, así como de lugares donde venden alimentos a precios regulados y no regulados
Por las redes sociales están circulando mensajes en aras de boicotear a los bachaqueros, revendedores, usureros y cuanto sujeto expenda artículos de la cesta básica a precios de locura. Esto que en un principio nadie le prestaba atención, ahora es casi viral, partiendo del hecho de que el presupuesto familiar no alcanza para comprar un kilo de azúcar en 3 mil bolívares o un cartón de huevos en 4.000 bolívares. Los grupos sociales digitales se han organizado de tal forma, que mantienen a contactos y seguidores al tanto de precios y ofertas, así como de lugares donde venden alimentos a precios regulados y no regulados. Cuando digo que nadie al principio les parecía gran cosa, la situación ha cambiado, ya que es sano -económicamente hablando- y es hasta una manera de contrarrestar la inflación, el bachaquerismo corporativo y la usura.
Entre los mensajes que han recorrido la plataforma Facebook, Twitter, Instagram, Periscopio y Blogs destacan: “semana del 15 al 21 de agosto 2016, boicot a los precios excesivos del cambur y plátanos; del 22 al 29 de agosto, boicot contra el tomate y pimentón, del 30 al 6 de septiembre boicot contra cebolla y papelón, de 7 al 15 de septiembre boicot cebollín y ajos. Activemos el 1×10 comunicacional para que este mensaje se replique a diez personas y esos diez a diez más y así”. Incluso en el mensaje establece que los consumidores europeos y estadounidenses aplican esa medida para hacer bajar los precios de los productos cuando consideran que los están estafando. Dos cosas importantes: uno, los plátanos, al igual que el cambur, el tomate y los huevos tiene un período de vida corto, más cuando el bachaquero o bachaquera los coloca en una improvisada mesa o un tarantín a pleno sol. Y cuando digo período de corto hablo de menos de 12 días para ser consumido; y dos, para boicotear hay que tener un plan B, es decir, hacerse de esos productos a través de la siembra en nuestros patios, jardines, azoteas o balcones, debido a que una comida no sazonada es muy mala. Así, camaradas, que usemos la conciencia y no compremos al bachaquero, por más difícil que sea obtener una crema dental, un litro de aceite, un kilo de arroz o un kilo de leche.
En ese orden, felicitaciones al combatiente tecnológico: Dimas González, quien en clara defensa del legado de nuestro comandante eterno, Hugo Chávez, creó el grupo PortuVerdad3.0 y ha logrado generar matrices de opinión sobre hechos informativos y noticioso tendenciosos que cuelgan en la red.
Un caso particular fue la divulgación de una imagen del plan vacacional de la Fundación del Niño de la Alcaldía de Iribarren, Barquisimeto 2016, en la cual los carajitos -en edades de 5 a 12 años- realizaban una caminata por el centro de la ciudad crepuscular ondeando la bandera de los Estados Unidos. Imagino que el de la idea fue el mismísimo alcalde apátrida: Alfredo Ramos, porque no hay otra explicación. Entiendo que Ramos y su combo de la MUD no quieran ni respalden las políticas económicas y sociales del gobierno del camarada presidente obrerista Nicolás Maduro, incluso asumo su desprecio por todo lo que huela a bolivarianismo, revolución o chavismo, pero confundir esos sentimientos con odio hacia la patria, hacia Venezuela, el país donde nació, es como maldecir a la mama que los parió. Desde aquí les digo: viva Venezuela, no joda.
Cruz Mario Silva
aporrea.org