Una de cada diez personas de entre 40 y 80 años sufre Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), una patología que causa 50 muertes diarias en España.
Una enfermedad crónica, como su nombre indica, que no tiene cura aunque sí tratamientos que permiten reducir sus síntomas y frenar el deterioro de los pulmones (si se detecta precozmente), permitiendo así mantener un nivel de calidad de vida aceptable.
La sensación de ahogo al andar o al aumentar la actividad física son los primeros síntomas de la enfermedad.
El problema más relevante de la EPOC según los expertos de a Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) es su elevado infra diagnóstico, que alcanza el 73 por ciento de los afectados.
Como consecuencia del retraso diagnóstico, cuando se inicia el tratamiento la enfermedad ya está muy avanzada y la función pulmonar muy deteriorada. “Para ello es imprescindible que las personas que forman parte del grupo de riesgo soliciten una espirometría”, explica el Dr. Juan Antonio Riesco, neumólogo y coordinador del Año SEPAR 2015-2016 de la EPOC y el tabaco.
“El binomio tos y fumar puede parecer algo normal, un peaje por el que deben pasar la mayoría de los fumadores, pero la tos es siempre una señal de aviso de que algo va mal”, aclara el experto.
Los síntomas respiratorios de la EPOC empiezan a manifestarse a partir de los 40 años, por eso los neumólogos recomiendan que si tienes más de 40 años, eres o ha sido fumador y tienes síntomas respiratorios como tos, expectoración o ahogo, solicites una espirometría para descartar EPOC.
Es una prueba sencilla que permite conocer el estado de los pulmones midiendo el aire que la persona es capaz de inspirar y espirar. La prueba consiste en respirar primero lentamente con normalidad y luego en coger y soltar todo el aire que puedas.
“Apenas dura 10 minutos, se realiza de forma ambulatoria y los resultados se obtienen al momento. A cambio, nos indica si la función pulmonar está alterada, lo que nos permite llegar a un diagnóstico y decidir un tratamiento útil”, concluye el Dr. Juan Antonio Riesco.
La relación entre EPOC y tabaco está científicamente contrastada, y hoy se sabe que el principal factor de riesgo de la EPOC es el tabaco. El 85 por ciento de las personas con EPOC son o han sido fumadores. La EPOC puede comenzar con tos y expectoración, pero serán la dificultad para respirar (llamada disnea) y la sensación de ahogo al andar o al aumentar la actividad física, los primeros síntomas de la enfermedad.
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