El Presidente de Ecuador dice que su país estudia «alternativas ante instancias judiciales internacionales para examinar la posibilidad de que Gran Bretaña se vea obligada a otorgar un salvoconducto»
QUITO. Ecuador sigue abierto al diálogo con Reino Unido sobre el caso de Julian Assange, asilado en su embajada en Londres, pero advirtió que podría acudir a la justicia internacional para que éste obtenga un salvoconducto que le permita salir de la sede diplomática, dijo el presidente Rafael Correa.
«Nosotros siempre hemos estado abiertos al diálogo», señaló Correa ayer en una rueda de prensa con corresponsales extranjeros.
«Así también lo han expresado Inglaterra y Suecia. Ojalá podamos mantener esos diálogos, que no van a ser negociación», manifestó el presidente al defender el derecho ecuatoriano a conceder asilo.
A la vez, Correa indicó que su país estudia «alternativas ante instancias judiciales internacionales para examinar la posibilidad de que Gran Bretaña se vea obligada a otorgar el correspondiente salvoconducto».
Sin mencionar ante qué organismos haría gestiones, el mandatario reiteró que se estudian «algunas estrategias legales (…) para ver la posibilidad de que se obligue a Gran Bretaña a otorgar dicho salvoconducto» para Assange, quien está dentro de la embajada ecuatoriana en Londres desde el 19 de junio para evitar su extradición a Suecia.
Ecuador concedió asilo diplomático a Assange, de nacionalidad australiana, el 16 de agosto, pero el fundador de WikiLeaks no ha podido salir de la embajada porque las autoridades británicas no le han otorgado el salvoconduto que le permitiría viajar Quito.
El jurista español Baltasar Garzón, quien coordina la defensa de Assange, ya había adelantado la semana pasada que podría acudir ante la Corte Internacional de Justicia para lograr el salvoconducto.
Sobre ello, Correa refirió este miércoles que si Londres continúa negándose a extender la autorización, Assange «puede pasar indefinidamente en nuestra embajada» y volvió a cuestionar una supuesta amenaza de Reino Unido de que podría tomar acciones para arrestar al creador de WikiLeaks en el interior de la legación.
«Un asalto a nuestra embajada para arrestar al señor Julian Assange sería algo intolerable y, obviamente, implicaría en forma inmediata la ruptura de relaciones con Gran Bretaña», afirmó.
Agencias