Vinotinto a mantener la línea de progreso
La goleada a Bolivia –por contundente, por sacudir el marasmo de los tiempos sin triunfo- puede ser un revulsivo para la Vinotinto. Sin embargo, hoy tiene en Quito una jornada cuesta arriba, en la cual necesita seguir mostrando progreso e, independientemente del resultado, confirmar la línea de juego que quiere imponer el seleccionador Rafael Dudamel: equilibrio en las líneas y, sobre todo, una visión ofensiva.
Claro que nada de eso es fácil, tanto que apenas comienza a verse ensamblaje, cariz de ataque y continuidad en la tenencia del balón. Eso sí, han surgido señales positivas y la victoria ante Bolivia da un notable impulso anímico por el solo hecho de serlo, por el abultado marcador y porque el aporte de nuevas figuras abre campo optimista al indispensable trabajo de renovación.
Hay serios obstáculos, sin embargo para añadir a un proceso apenas en sus inicios y lleno de dificultades. El primero, por supuesto, la calidad del elenco ecuatoriano, patente a lo largo de la eliminatoria, aun en el desempeño en la derrota de la semana pasada en Uruguay. Y, no menos importante, los 2.700 metros de Quito, donde los cosas cambian diametralmente en el aspecto físico y suponen un reto para cualquier colectivo.
Se asegura, al respecto, que el cuerpo técnico ha previsto algunos cambios de jugadores. Y que el talante ofensivo no sería tan manifiesto, si bien la marca desde la salida es indispensable, sobre todo porque se trata de un rival con jugadores habilidosos, de buen toque y recursos ofensivos que van desde el contragolpe veloz hasta el avanzar hilvanado, con más pases, y la amenaza de botines con pólvora desde distintos puntos. Y que sabe “abrir la cancha” pues parte integral su fuerza está en el buen aprovechamiento de las bandas.
Ayer se anunciaba que Rolf Feltscher, uno de los más fogosos defensores del área venezolana, no estaría disponible por lesión, cosa que debía confirmar el Dt en la rueda de prensa de la tarde, antes que el equipo hiciera el reconocimiento de rutina al escenario del juego, el estadio Atahualpa. La preparación táctica viene siendo afinada en la Casa Blanca, sede del club Liga Deportiva Universitaria de Quito.
Se hablaba de algunos cambios en la defensa además de la inclusión de Villanueva por Feltscher, con Wuilker Angel volviendo al centro, y se especulaba sobre José Ramón Velázquez. Tomás Rincón, Rómulo Otero y Josef Martínez eran considerados piezas inamovibles, a la espera de que Dudamel confirme a jugadores como Kouffati y Murillo –este fue de lo mejor ante Bolivia- pero también se juega con la posibilidad del regreso de Peñaranda, que tan buenos momentos ha brindado en los partidos más recientes.
Quizás en horas de la tarde-noche se conociese más sobre la alineación. Lo cierto es que ayer, entre muchos antecedentes, se insistía en la casi invulnerabilidad ecuatoriana en Quito: solo 3 derrotas en 27 partidos oficiales. Pero se recordaba, asimismo, que uno de los 3 ha sido Venezuela (Uruguay y Brasil los otros), cuando bajo la batuta de Richard Páez ganó 1-0 en 2007 con uno de aquellos bombazos que –junto a su enorme calidad- hicieron famoso a José Manuel Rey, en este caso un tiro libre desde el borde del círculo central.
Jornada suramericana
La jornada de hoy, que también incluye los partidos Bolivia-Paraguay y Argentina-Colombia, cierra las eliminatorias por este año. Antes de cumplirla, Ecuador está en puesto de clasificación, el cuarto, empatado con Chile en 17 puntos y 19-16 en goles anotados y recibidos. Brasil lidera con 24, seguido por Uruguay (23) y Colombia (18), en la parte baja de la tabla Argetina (16), Paraguay (15), Perú (14), Venezuela (5, 14-26 en goles) y Bolivia (4).
-Armando Naranjo-