En Venezuela se cometen a diario cuatro feminicidios en promedio y en lo que va de este año unas mil mujeres han sido asesinadas, según datos del Observatorio Venezolano de los Derechos Humanos de las Mujeres (OVDHM).
Entrevistado por Notimex con motivo de que este viernes se celebra el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, el presidente de la Asociación Venezuela en Paz (Venepaz), Arturo Colina, comentó que la edad promedio de las víctimas es de 32 años.
Sin embargo, en la lista elaborada por el Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) los asesinatos de mujeres incluyen niñas, adolescentes y adultas de todos los estados del país.
Un estudio realizado recientemente por Venepaz en todo el territorio nacional indica que el estado central de Carabobo y el Distrito Capital (Caracas) son las entidades con mayor número de víctimas, con 300 y 400 casos, respectivamente.
“En tercer lugar está Miranda, estado contiguo a Caracas, con 150 casos, y luego le siguen el central estado Aragua y el occidental estado Zulia, con 80 y 70 damas asesinadas, respectivamente”, indicó el activista.
Resaltó que cifras extraoficiales muestran un aumento de 73 por ciento en la cantidad de mujeres que han sido asesinadas en el área metropolitana de Caracas y no precisamente por motivos pasionales, lo que llama la atención de las autoridades.
A juicio del sociólogo Rafael Marín, en la actualidad las mujeres no son asesinadas solo por motivos pasionales o fútiles, catalogado por las autoridades como violencia de género, sino que a menudo son víctimas de venganzas y ajustes de cuentas.
“Ello obedece al aumento de la participación de las mujeres en actividades delictivas. Hoy ellas forman parte de bandas de ladrones, secuestradores y tráfico de drogas y por ello también se convierten en víctimas de venganzas y de ajustes de cuentas”, dijo.
Aclaró que en los casos de venganzas también sucede que a veces no es la mujer la vinculada a la actividad delictiva, pero les cobran a ellas las deudas pendientes de su novio o amante que quizá sea el que realmente se dedica a la operación criminal.
“Esa es otra arista bien lamentable dentro del ámbito delictivo, porque las mujeres que son parejas de delincuentes están, finalmente tan expuestas como ellos y por esa vinculación afectiva sentimental las matan sin misericordia”, indicó.