«El verdadero premio es la paz de mi país. ¡Ése es el verdadero premio!», exclamó el presidente colombiano ante el auditorio
El presidente colombiano Juan Manuel Santos recibió este sábado en Oslo el premio Nóbel de la Paz, «en nombre de las víctimas» del conflicto en Colombia al que ha puesto fin un acuerdo con las FARC que espera sirva de modelo a otros países en guerra.
En una solemne ceremonia en el ayuntamiento de la capital noruega, ornado para la ocasión con rosas y claveles traídos de Colombia, y en presencia de los reyes Harald y Sonia, Santos afirmó que el pueblo de Colombia, «con el apoyo de nuestros amigos de todo el planeta, está haciendo posible lo imposible».
«La guerra que causó tanto sufrimiento y angustia a nuestra población, a lo largo y ancho de nuestro bello país, ha terminado», añadió.
Santos, bogotano de 65 años, recibió el galardón «en nombre de las víctimas», y lo dedicó a los negociadores del gobierno y de la guerrilla de las Farc, que pusieron fin a un conflicto de más de 50 años que causó 260.000 muertos y más de seis millones de desplazados.
«El verdadero premio es la paz de mi país. ¡Ése es el verdadero premio!», exclamó el presidente colombiano ante su auditorio.
Por la noche, varios centenares de personas se congregaron ante el hotel donde se aloja Santos para la llamada «procesión de las antorchas» que organiza el Comité Nóbel, a la cual el presidente saludó fugazmente desde un balcón.
Dylan, el gran ausente
Bob Dylan, laureado con el Nóbel de Literatura, fue el gran ausente en la entrega de premios de este sábado, que tuvo lugar en Estocolmo para las disciplinas científicas, de literatura y economía, y en Oslo, en el caso del de la Paz, concedido al presidente colombiano Juan Manuel Santos.
En la Konserthuset donde la Fundación Nobel organiza cada año una suntuosa ceremonia, los nuevos laureados presentes recibieron de manos del rey Carlos XVI Gustavo de Suecia, una medalla de oro y un diploma.
Miguel Enesco / AFP
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