El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ratificó este domingo su compromiso con el diálogo para superar el conflicto político con la oposición y confirmó que esta semana los mediadores retomarán los esfuerzos para descongelar la negociación.
«Estamos preparados para cumplir con mi palabra empeñada en 2017: consolidar el diálogo político con factores contrarrevolucionarios», expresó el mandatario en la presentación de su informe anual de gestión ante el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), donde condenó la extensión del Decreto Obama, amenazó con lucha armada “si intentan un golpe” y afirmó que su gobierno “logró reducir la pobreza y la miseria a pesar de la crisis económica”.
En un discurso que se extendió por casi cinco horas, criticó el mandatario la decisión tomada viernes por su homólogo estadounidense, Barack Obama de extender la vigencia de la acción ejecutiva que declara a Venezuela una amenaza para la seguridad nacional y la política exterior de Estados Unidos.
El presidente Nicolás Maduro se dijo dispuesto a ir a una «lucha armada continental» si se intenta un golpe de Estado o se trata de «quebrar» a Venezuela.
«Se acabaría la paz en este continente», advirtió Maduro el domingo durante su discurso desde el Tribunal Supremo de Justicia, donde presentó su mensaje anual de gestión.
La semana pasada, Maduro acusó a la mayoría opositora del Congreso de promover un golpe de Estado en Venezuela al aprobar una declaratoria de abandono del cargo del mandatario por el supuesto incumplimiento de sus funciones constitucionales. Desde que asumió el gobierno en 2013 el presidente ha denunciado varios complots y planes desestabilizadores.
Críticas a Obama…
Maduro aprovechó un discurso que se extendió por casi cinco horas para criticar la decisión tomada viernes por su homólogo estadounidense, Barack Obama de extender la vigencia de la acción ejecutiva que declara a Venezuela una amenaza para la seguridad nacional y la política exterior de Estados Unidos.
El gobernante indicó que esta decisión deja abierta una «puerta peligrosa» que podría ser utilizada para intentar una «agresión militar» contra el país suramericano.
Maduro lamentó no haber entregado su informe anual de gestión al Congreso y añadió que el país enfrenta una «circunstancia excepcional» en materia económica por lo que aprobó, por segundo año consecutivo, un decreto de emergencia económica.
Por otra parte, el presidente admitió que la abrupta caída de los ingresos llevó al país a una situación económica «difícil» y «compleja» que aún se está superando, y dijo que a pesar de ello se dio un «milagro de Dios, milagro de la revolución», porque no cerraron centros educativos ni se despidieron empleados públicos.
En su alocución, Maduro se quejó del contrabando de gasolina y otros productos hacia territorio colombiano, y anunció que Caracas se «reserva las acciones internacionales ante todos los organismos» por la «violación» de las leyes del comercio y la «promoción» del contrabando de combustible hacia Colombia.
«Ya basta de agresiones de Bogotá y de la oligarquía colombiana contra Venezuela», dijo el mandatario. Precisó que a partir del lunes se abrirán casas de cambio en la región fronteriza, del lado venezolano, y próximamente se instalarán tiendas en las que se venderán productos en pesos colombianos.
Como medida económica para proteger a los trabajadores, Maduro anunció que se exonerará del pago del Impuesto Sobre la Renta a las personas que reciban ingresos anuales por debajo de 6.000 unidades tributarias.
Luego de ser por más de medio siglo la instancia encargada de recibir el informe anual de gestión del mandatario, tal como lo establece la constitución, el Congreso venezolano perdió otra de sus atribuciones por decisión de la Corte, que es señalada de estar controlada por el gobierno y que autorizó la semana pasada a Maduro a presentar su discurso ante los magistrados.
Fortalecido…
Maduro dijo este domingo que salió fortalecido de la prueba del “largo y duro” año 2016 y afirmó que cualquier otro gobierno no hubiera sobrevivido a sus embates.
Aseveró que el gobierno ha cosechado una serie de logros en todos los campos, incluso en el económico, “donde más daño nos hicieron, pero la revolución bolivariana permitió elevar la inversión social”.
A la vez, criticó la resolución legislativa del 9 de enero que declaró el abandono del cargo presidencial, que calificó de “sediciosa y golpista”, cuando es “público que este humilde obrero ejerce activa y cabalmente todas sus constitucionales día por día».
Maduro dijo que su gobierno está comprometido con el diálogo político con la oposición, con el objeto de consolidar la paz y estabilidad del país, al tiempo que acusó a la coalición opositora Mesa de Unidad Democrática (MUD) de negarse a sostener las conversaciones.
Indicó que en 2016, pese a la caída de los ingresos petroleros, el gobierno mantuvo la inversión social a niveles considerables, aumentó cinco veces el salario mínimo nacional, incrementó el número de pensionados y mantuvo el ritmo de construcción de viviendas, lo que llamó un “milagro de Dios, de la revolución” bolivariana.