Se trata del octavo lote de billetes que recibe el país desde el 18 de diciembre, fecha en la que llegó el primero. Está previsto que otros cuatro lleguen entre el 10 de febrero y el 3 de marzo
Un nuevo cargamento de billetes llegó este jueves a Venezuela, donde las piezas del flamante cono monetario con el que el gobierno busca paliar la profunda devaluación aún no circulan masivamente.
En total, 13 millones de billetes de 10.000 bolívares y 18,5 millones de 5.000 arribaron a Caracas, provenientes de Newcastle (Inglaterra), dijo el vicepresidente del Banco Central (BCV), José Khan.
Suman 222,5 millones de bolívares (unos 308.000 dólares a la tasa oficial más alta).
Los nuevos billetes empezaron a circular el pasado lunes, con un mes de retraso con respecto al anuncio oficial.
Se trata del octavo lote de billetes que recibe el país desde el 18 de diciembre, fecha en la que llegó el primero. Está previsto que otros cuatro lleguen entre el 10 de febrero y el 3 de marzo.
El billete de mayor valor es de 20.000 bolívares (27,7 dólares) y sustituye al de 100, que estará vigente hasta el 20 febrero, aunque ya lo reemplaza una moneda.
Antes del arribo del lote de este jueves, el presidente Nicolás Maduro informó que habían llegado 60 millones de piezas de 500 bolívares, 4,5 millones de 5.000 y 2,9 millones de 20.000.
Lo recibido hasta ahora es «insuficiente», según la economista Anabella Abadi, quien prevé que por ello Maduro tendrá que seguir prorrogando la vigencia del de 100.
Las nuevas denominaciones aún no llegan a muchos.
«Solo los he visto en fotos, no he visto a nadie que tenga uno», contó este jueves a la AFP Andrés Pérez, de 26 años, mientras hacía fila para retirar efectivo en un cajero electrónico que solo dispensaba billetes de 100.
Alix Useche, gerente de una sucursal bancaria de Caracas, confirmó que, a la fecha, el nuevo papel moneda solo se entrega por ventanilla.
«Ya los recibimos, pero por ahora solo se entregan por taquilla, porque no se han programado los cajeros», declaró a la AFP.
La economista Abadi sostiene que hay un problema con el tamaño de los nuevos billetes. «Arreglarlo en todo el país puede tomar 90 días», sostuvo.
Con las nuevas denominaciones, el gobierno busca paliar los efectos de la inflación, que pulveriza los ingresos de los venezolanos y los obliga a cargar con grandes fajos de efectivo.
El Fondo Monetario Internacional proyecta que el índice inflacionario llegará a 1.660% este año, tras un 475% en 2016.
AFP