Ante la contundencia de la acusación presentada por el Ministerio Público, fueron condenados a 30 años de prisión tres exefectivos de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y un exfuncionario de la Policía del estado Barinas, por su responsabilidad en el secuestro a un comerciante de 33 años de edad.
El hecho ocurrió el 08 de mayo de 2009, en Socopó, municipio Sucre de la referida jurisdicción.
Durante el juicio oral y público, la fiscal 10º del estado Barinas, Maggien Sosa, ratificó la acusación contra los tres exefectivos castrenses, Jean Carlos Rondón, Geomar Valera y Henry Bastidas, por la comisión de los delitos de secuestro y asociación para delinquir, con los agravantes de ser funcionarios públicos.
Asimismo, la representante del Ministerio Público ratificó la acusación contra el exfuncionario policial Wiliam Arenales, por los referidos delitos.
Una vez evaluados los medios de pruebas presentados por el Ministerio Público, el Tribunal 2° de Juicio de Barinas dictó la referida sentencia condenatoria contra los cuatro hombres, quienes se encuentran recluidos en el Internado Judicial de esa jurisdicción.
El citado día, el comerciante desayunaba en un establecimiento de comida vegetariana ubicado en el referido lugar, cuando inesperadamente fue abordado por varios hombres, quienes lo obligaron bajo amenaza de muerte a montarse en su vehículo marca Toyota.
Posteriormente, la víctima fue trasladada a otro carro, donde le colocaron una inyección que lo durmió de inmediato, al tiempo, que los familiares del comerciante recibieron llamadas, a través de las cuales les solicitaron cinco millones de bolívares por la liberación del secuestrado.
Tras varias diligencias de investigación realizadas por funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), y del Grupo Antiextorsión y Secuestro de la GNB, el 24 de mayo de 2009, en horas de la madrugada, el comerciante fue localizado en una residencia ubicada en el barrio Santo Domingo del estado Barinas.
Cabe destacar que en el momento de la liberación, la víctima estaba amarrada a una cama, con los ojos vendados con adhesivo quirúrgico y atada de manos y pies. El 23 de mayo, Bastidas fue aprehendido por funcionarios del Cicpc en Guasdalito, estado Apure.
En el caso de Arenales y Rondón fueron detenidos en el Destacamento 14 del estado Barinas el mismo día del rescate; mientras que Valera fue aprehendido el 25 de mayo de 2009 por efectivos de la policía científica en el estado Aragua, en atención a órdenes de aprehensión solicitadas por el Ministerio Público y acordadas por un Tribunal de Control de Barinas.