Alexander Da Silva, quien ahora mismo reside en Londres, es el protagonista de la película venezolana más taquillera a finales del 2016: El peor hombre del mundo
El joven actor Alexander Da Silva, quien se encuentra actualmente radicado en Londres cursando estudios relacionados con su profesión, gracias al largometraje El peor hombre del mundo, se convirtió en el protagonista de la película venezolana estrenada a finales del año 2016 más taquillera, pues hasta la fecha esta comedia producida por la actriz Elaiza Gil y dirigida por Edgar Rocca, suma 70.148 espectadores según cifras de Asoinci y se sigue proyectando en diversas salas a nivel nacional; dejando atrás en recaudación a otros estrenos del año pasado como Tamara y CAP: 2 intentos.
El intérprete del desalmado Rasco del laureado filme Azul y no tan Rosa, no ha podido vivir de cerca los resultados de esta ópera prima, ya que a mediados de 2016, una vez que culminó las grabaciones del dramático estelar de Venevisión Entre tu amor y mi amor -donde dio vida a Carlucho-, agarró sus maletas para seguir cultivándose profesionalmente en materia de cine, pero gracias a las redes sociales ha podido interactuar con el público local, que ha premiado a esta cinta con la asistencia a las salas. Paralelo a eso se acaba de estrenar como uno de los protagonistas del videoclip de la canción Por qué será, sencillo promocional del nuevo disco de la cantante Karina titulado Tequila y Rosas.
Mucha taquilla
-¿Te esperabas los resultados de El Peor Hombre del Mundo. Por qué crees que se alzó como la cinta venezolana más taquillera de 2016?
-La taquilla siempre ha sido una moneda al aire para todos los que trabajamos en cine y si incluimos la “situación país”, es aún más difícil de predecir. Sinceramente, la distracción de estar viviendo afuera hizo que no pensara mucho si tendría éxito o no. Eso ha hecho que las noticias que recibo cada semana acerca de la taquilla y los comentarios a través de redes sociales sean maravillosas sorpresas para mí; la respuesta de la gente ha superado gratamente mis expectativas. Creo que el éxito se debe a que es una película sin pretensiones, una comedia simpática y agradable.
–¿Qué te motivó a hacer este filme, tratándose de un director y una productora nóveles en esta lides?
–Los actores inocentemente nos enamoramos de personajes. La empatía es tan grande que cuando lees un guion y te enganchas en un rol, en ocasiones poco importa el dinero, tiempo, los productores. Hasta nos olvidamos del guion como un conjunto por el afán de interpretar a esa persona. En este caso me enamoré perdidamente del personaje, además que detrás del proyecto estuviese una maravillosa actriz y ahora productora como Elaiza Gil, para mí generaba una tranquilidad de que era un proyecto serio, lleno de pasión y cariño. Y Edgar Rocca, con su sencillez, me demostró que es un director que tenía pasión por contar historias, era difícil no sentirme identificado. Las óperas primas son particulares, llenas de novatadas, pero también de entrega y de entusiasmo. No tengo miedo de trabajar en óperas primas, siempre y cuando tengan a gente sólida y confiable como cabeza del proyecto.
–¿Es cierto que hiciste “maromas” para que te seleccionaran de protagonista. Cómo fue ese proceso?
–Sí, conversando con mi amigo y director Alejandro Hidalgo (La casa del fin de los tiempos), le comentaba lo que sentí por el papel y las ganas que tenía de interpretarlo. Él me animó a llamar a los productores y convencerlos de que yo era el actor perfecto y así lo hice. Yo mismo llamé a Elaiza por teléfono para decirle: “¡Yo soy el peor hombre del mundo!” Conseguí una reunión con Rocca y le expliqué el por qué de mi empatía con el proyecto, mis motivaciones, mi visión del personaje y ganas de hacerlo. Por causalidades de la vida, el actor que habían escogido no podía hacer la película y terminé siendo yo. Siempre estaré agradecido con Edgar y Elaiza por creer en este loco. Esto lo cuento abiertamente no solo para actores sino para el público, como un testimonio de que las cosas se ganan con un paso adelante, sin pisar a nadie, basta solo una chispa de convicción y astucia.
–¿Cómo se siente vivir el éxito de El Peor hombre del mundo a distancia. Cómo has llevado ese hecho?
–Confieso que es muy extraño, hay un vacío por no haber podido estar presente en la premier y promoción, sumado a que solo tuve oportunidad de ver el primer corte, por lo que no he visto la película en su última versión. Pero me consuela la comunicación que tengo con mis seguidores en las redes sociales (@SoyAlexDaSilva). Ahí de alguna manera u otra me vuelvo a sentir parte de esta etapa y tengo un “feedback” directo de lo que está pasando.
–¿Qué te encuentras haciendo en Londres, cuéntanos de tus proyectos en esta nación europea?
–En estos momentos me encuentro estudiando una maestría en dirección de cine en “Raindance Org.”, en asociación con la Staffordshire University, a la par que escribo mi guion de largometraje. El año pasado gané una beca otorgada por el Centro Nacional Autónomo de Cinematografía (Cnac) para desarrollar mi guion, así que me propuse hacer una pausa durante este año para hacer esta maestría y prepararme para la dirección en un futuro cercano.
–Eres un actor que ha estado muy involucrado en el cine nacional, incluso a nivel de producción. Te consideras un abanderado de nuestro séptimo arte?
–El cine siempre ha sido mi pasión, sea como actor, director o productor. Tengo mi productora llamada Ocho Films, con la cual he sido productor ejecutivo asociado de las películas venezolanas La casa del fin de los tiempos, Azotes de barrio y El show de Willi. He dirigido, escrito y producido tres cortometrajes, pero esta faceta se vio interrumpida por la cantidad de trabajo que he tenido como actor. De alguna manera y con orgullo me siento precursor y promotor del cine venezolano contemporáneo, además de ser mi bandera como actor.
–¿Ya que te apasiona tanto el cine, para cuándo tu ópera prima y cómo podría ser ese filme soñado?
–Estoy trabajando en ello, de hecho he incluido dentro de la maestría que estoy realizando mi guion como proyecto final. Pero faltan un par de años para eso, aún me falta por prepararme. Sin embargo, este proyecto se ha convertido en mi más gran sueño, la razón por la que todos los días me levanto a pesar de extrañar tanto a mi país y a mi familia. Por ahora no veo posibilidades de protagonizarlo, me gustaría enfocarme en la dirección, que ya es bastante compleja como para querer abarcarlo todo. Pero la vida da muchas vueltas, ¡habrá tiempo para decidirlo!
Y también el “amante” de Karina
–Se acaba de estrenar el videoclip Por qué será de Karina, donde eres coprotagonista de la historia. ¿Qué opinas de esta propuesta audiovisual?
Es la primera vez que estoy en un videoclip y trabajar con Karina fue una experiencia increíble, es una mujer fuerte, imponente, está de más decir lo talentosa que es, pero ella vibra fuertemente en su energía. El proyecto fue muy divertido por compartir de nuevo con mi colega Sócrates Serrano y desde hace tiempo quería ser dirigido por Marcel Rasquín, ya que una de mis películas venezolanas favoritas es su filme Hermano. Lo que más me gustó del audiovisual es que tiene una historia detrás del performance. ¡Me encantó ser el amante de Karina! (risas). Además, el final abierto se presta a distintas versiones de la relación entre los personajes y la canción interpretada por ella es excelente.
Coordenadas de Alexander Da Silva
Para seguirlo en sus redes sociales (Instagram, Twitter, Facebook y Snapchat: @SoyAlexDaSilva.
Diego Kapeky
Foto: Jhon Pérez
