El sacerdote Numa Molina, párroco de la iglesia de San Francisco, reiteró que algunos venezolanos se han alejado de la Iglesia Católica por el discurso “político-partidista” de los obispos. Resaltó que es posible que la Iglesia y el chavismo “limen asperezas”, si encuentran lo que los une.
Así lo dijo durante el programa José Vicente Hoy, transmitido por Televen que reseñó Noticiero Digital.
José Vicente Rangel comentó que el católico venezolano es “atípico”, pues “es poco practicante, pero es creyente y al mismo tiempo desarrolla una capacidad de independencia de la política. Aquí la mayoría de los chavistas son católicos, por ejemplo, es un dato muy importante”.
“Una gran mayoría, ese es un dato importantísimo que hay que tomar en cuenta. La Iglesia venezolana a nivel de lo institucional debería tomar en cuenta (ese dato) porque un alto porcentaje del chavismo es católico, estadísticamente está comprobado, yo no sé si está entre el 75 y el 80 %, según unas estadísticas que existen de 2014. Cuando hablas de religiosidad popular, hablas de catolicismo popular, hablas también de un hombre que es de los sectores populares o de una mujer que tiene un modelo de ver, político, en este momento que vive el país. Y eso cuenta, eso es importante tenerlo en cuenta”, enfatizó Molina.
Rangel preguntó: “¿A qué atribuye usted ese distanciamiento que hay en el mensaje, esa relación de la jerarquía católica y del pueblo católico, con el pueblo chavista, mejor dicho?”
“Tal vez no hemos caído en la cuenta que la cercanía al sujeto es fundamental en todo proceso pastoral y que la gente valora aquellos líderes políticos, religiosos que se acercan a ellos. Cualquier personaje con influencia pública, cualquier personaje público que tenga como elemento fundamental de su trabajo el acercarse a la gente, y no sólo acercarse por aparentar, por hacer un poco de teatro, no, aquel líder porque quiere al pueblo, además porque viene del pueblo muchos de ellos (…) la gente eso lo valora muchísimo y cuando te alejas de ellos, cuando pretendes desde una oficina, desde un curul, desde cualquier espacio de escritorio, llegarle a la gente, no basta, no basta el Twitter, no bastan las páginas web, no bastan los correos electrónicos ni los mensajes de texto, hay que llegarle al pueblo, hay que estar con ellos”, manifestó el sacerdote.