Jóvenes del Instituto Rafael Rangel pintaron un mural para estimular la preservación y el respeto por los símbolos naturales del país
Con el patrocinio del portal web Crónica.Uno, seis alumnos de 5º año del Instituto Rafael Rangel plasmaron en la pared principal de ese plantel el mensaje: “Proteger los símbolos naturales es deber de todos”, que en el caso de Venezuela serían la Orquídea, el Turpial y el Araguaney; reconocidos de manera oficial como íconos propios de nuestro país.
La actividad, solicitada por los vecinos de la urbanización Carlos Delgado Chalbaud a este portal, se enmarcó en la celebración de los 75 años de la creación de esta institución privada, que se encuentra ubicada en la vereda 61. Allí estudian chamos que viven en las parroquias El Valle y Coche.
La profesora Adriana Solares, coordinadora de Bienestar Estudiantil, informó que este año se realizarían pocas actividades durante la semana aniversario porque el Rafael Rangel está de luto por el fallecimiento, hace un mes, del profesor Carlos Monsalve, quien fue director durante cuatro años. Por ello, además de la pintura del mural solo se hicieron una verbena, juegos deportivos y una misa.
Festín de colores
Gabriel Noriega, Gabriel Briceño, Jesús Peñaloza, Alenis Manzanilla, Raicel Mercedes y Franklin Lucero fueron los alumnos seleccionados por las autoridades del instituto para pintar el mural, quienes, con ropa adecuada para la actividad, tomaron brochas y comenzaron a pintar el fondo de la pared con colores verde y azul. Los alumnos expresaron su satisfacción de participar en el mural porque enviaban un mensaje positivo a la comunidad.
Franklin Lucero dijo que la frase fue seleccionada por los alumnos del 5º año que forman parte de la XVII promoción del liceo de educación media, mención Ciencias. Raicel Mercedes afirmó que: “Trabajamos en el mural para que quede bien bonito, se mezclaron colores, pintamos una pared para darle un mejor toque al liceo, el mensaje lo elegimos entre todos”. Y Alenis Manzanilla, la madrina de 5º año B, afirmó que le gustan las manualidades y que nunca había pintado un mural, se encargó de pintar en blanco las letras del mensaje.
Intercambiaron ideas con la muralista Alessandra Baloa, estudiante de Artes, quien consultó con ellos los colores a utilizar para plasmar el mensaje en la pared. “Me pareció excelente el entusiasmo que ellos tenían y lo organizados que estaban para trabajar, además estaban abiertos a nuevas ideas y concentrados cada uno en contribuir en algo”.
Los chamos y la muralista restauraron el mural de una pared y pintaron el nuevo, como símbolo natural dibujaron un araguaney. Compartieron chucherías y agua potable mientras hacían la obra de arte, que ha recibido halagos de la comunidad. Muchos vecinos se acercaron a solicitar apoyo para rescatar espacios cerca de sus comunidades.
(Con información de Norma Rivas/cronica.uno.com)