El papa Francisco recibió el jueves a miembros de la Conferencia Episcopal Venezolana en El Vaticano, encuentro en el cual monseñor Diego Padrón expresó, entre otras cosas, la situación actual de Venezuela y el aumento de conflictividad como consecuencia del profundo sufrimiento al que se viene sometiendo al pueblo de Venezuela y al que ahora se suma el empeño del Gobierno nacional en un proceso constituyente peligroso e innecesario y que no es la solución para los graves males que aquejan a los venezolanos.
Terminada la lectura del discurso por parte del presidente de la CEV, el sumo pontífice expresó de forma inmediata su preocupación y dolor por lo que está pasando Venezuela.
“Estoy al tanto de todos los eventos que se están produciendo en el país”. Expresó además que comparte completamente la percepción que tienen los obispos sobre la crisis venezolana y aseguró al Episcopado venezolano que contaban con todo el apoyo y la simpatía de todos los órganos de la Santa Sede. De esta manera, Francisco reafirmó que en la voz de los obispos venezolanos también resonaba la suya.
Francisco ratificó su apoyo a los obispos venezolanos y les invitó a seguir del lado de la gente, a no abandonarlos en su empeño por alcanzar un país más justo, a seguir trabajando por la paz y a hacer todo lo que puedan por los más vulnerables. “Cuenten con mi ayuda en favor de la gente que hoy pasa hambre y necesita medicamentos”.