En medio de la represión de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) en Chacaíto, un grupo de manifestantes encapuchados incendió con bombas molotov un camión de uso oficial, perteneciente al Ministerio de Transporte Terrestre, en El Rosal, cerca de la sede de la Organización Nacional Antidrogas (ONA).
El vehículo había sido secuestrado y, posteriormente, desvalijado por los jóvenes, quienes además escribieron sobre su carrocería algunos mensajes mediante los cuales exigían respeto a las manifestaciones pacíficas y denunciaban la crisis alimentaria.
En el camión se encontraba el conductor, quien salió justo cuando la bomba molotov fue arrojada hacia la cabina del chofer.
Él no había levantado el freno de mano y el vehículo se movilizó solo hasta que se estrelló contra un árbol.
Seguidamente, unos trabajadores de la ONA salieron a extinguir las llamas con extintores de incendio. Sin embargo, en ese momento los muchachos los enfrentaron para impedir que el personal del organismo apagara el fuego. Les reclamaron e incluso les dieron golpes a los empleados públicos.
Al instante, funcionarios de la PNB se acercaron al sitio para detener la acción de los jóvenes, quienes huyeron al ver la presencia de los agentes. Uno de los trabajadores intentó sacar un arma de fuego para defenderse de los manifestantes encapuchados.