La Guardia Nacional Bolivariana habría detenido por los hechos a cinco personas, entre ellas a una mujer, pero no incautó ningún tipo de mercancía
“Quedamos en pérdida total”, dijo uno de los dueños de la tienda El Fortín, saqueada la madrugada de este martes 27 de junio en el Centro Comercial Palo Verde.
Veía a su alrededor y solo encontraba mostradores completamente vacíos y destruidos. En el comercio no quedaban sino cinco maniquís que no alcanzaron a cargar, pues hasta eso se llevaron.
Uno de los dueños, que no se identificó por seguridad, contó que, además de la ropa, cargaron con cornetas, la caja registradora, el filtro de agua, la planta y computadoras.
“Estoy indignado, esto es vandalismo, es malandraje. Pero hay que seguir trabajando porque si no, no hay esperanza”, dijo con expresión desoladora ante un local completamente destruido, con el que tiene más de 30 años.
Cerca de los vidrios, todos reventados, reposaban en el suelo dos botellas llenas de líquido y en la punta restos de tela.
Presume que eran dos bombas molotov que no explotaron.
El comerciante calculó que solo en la reparación de los vidrios gastará más de 14 millones de bolívares. También fue víctima en los saqueos ocurridos en abril en el Centro Comercial Miranda, en Guarenas. “Ese también quedó en pérdida total”.
Por la puerta principal
Voceros de la junta de condominio del centro comercial presumen que los sujetos que ingresaron a saquear entraron por la puerta principal. Según observaron en las cámaras de seguridad, levantaron las rejas y, una vez adentro, tres hombres la alzaron para que pasara el resto.
Eran al menos 60 entre hombres y mujeres, algunos encapuchados. Trascendió que la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) detuvo a cuatro hombres y una mujer cuando salían, pero no decomisaron ningún artículo.
Muy cerca de El Fortín estaba el Salón de Belleza Grupo Líder, también destruido. A través de los vidrios rotos se veía a las empleadas observando los destrozos.
Las mesas de trabajo, las sillas, lámparas y muebles estaban regados en el piso. Se llevaron secadores, planchas para el cabello, microondas, artículos de las manicuristas, tijeras, tintes, agua oxigenada y una fuerte suma de dinero en efectivo, pues tenían dos semanas con el punto de venta dañado.
Un total de 17 empleadas trabajan ahí y la mayoría son madres y sostén de familia. Por eso, planean trabajar con lo que puedan conseguir mientras van arreglando las vidrieras.
“Vamos a hablar con compañeros para que nos guarden las cosas que quedaron, mientras podemos montar los vidrios, para ir trabajando con lo que se pueda. Algunas van a pedir préstamos para seguir viniendo”, dijo.
Se llevaron todo
En la planta baja también saquearon un comercio de apuestas, se llevaron alrededor de seis computadoras y también destrozaron las vidrieras. En el piso 2, arrasaron con una tienda de venta de videojuegos y artículos de electrónica, una mueblería y La Ovejita.
Comerciantes de Karubi Electrónica indicaron que del mostrador se llevaron varios Nintendos y PlayStation, nuevos y usados.
También agarraron videojuegos, cables USB, memorias, pendrives, baterías de celulares, módems, cornetas, reguladores, fuentes de poder, teclados, mouse y regletas.
La Ovejita fue una de las menos afectadas por ser la última. Una de las encargadas destacó que le reventaron los vidrios y se llevaron mercancía. Presume que no cargaron con todo porque entraron al final. “Hay prendas que me recuperaron los del centro comercial y que quedaron en otras tiendas”, dijo.
En un video de seguridad se observaron alrededor de seis hombres rompiendo la vidriera con un tubo, que quedó en el sitio.
Exigió que las autoridades investiguen lo sucedido porque no se explican cómo ingresaron y además robaron tiendas sin que ninguna autoridad los detuviera. Añadió que de Paolo Muebles sacaron colchones.
Saqueos planificados
Vecinos de Palo Verde, quienes no quisieron identificarse por seguridad, contaron que en la zona no se registraron manifestaciones en horas de la noche del lunes 26, solo una escaramuza en la entrada de la urbanización que evitó el paso de vehículos. Por esto, presumen que los delincuentes tenían planificado los saqueos al centro comercial.
“A la altura de La Fortaleza, en José Félix Ribas, pusieron barricadas y quitaron las alcantarillas. Ahí había gente gritando, pero me parece que era algo premeditado. Vi un carrito viejo oscuro, con seis motorizados, con parrillero, todos con las luces apagadas y estaban rondando la zona», detalló un residente.
Agregó que la GNB acudió con una tanqueta, pero minutos después se retiró y fue en ese momento que ingresaron los sujetos al centro comercial. Testigos dijeron que una hora después los efectivos regresaron, tras denuncias y llamadas constantes.
(Con información de Yoyana Marra/cronica.uno.com)