El gobierno y el tribunal supremo de Venezuela convocaron este jueves a embajadores acreditados en Caracas para pedirles que reflejen la «verdad» sobre un ataque con granadas contra esa corte desde un helicóptero policial.
El presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), Maikel Moreno, les mostró a un grupo de diplomáticos, entre ellos de Corea del Norte, Irán, Egipto, El Salvador, Ecuador y Trinidad y Tobago, los daños que causó el «atentado terrorista» del martes, y los exhortó a convertirse en «multiplicadores de la verdad» sobre este hecho.
Una ventana rota y un árbol impactado fueron presentados como evidencia durante el recorrido, en el que tomaron parte el canciller venezolano, Samuel Mocada, y reporteros de medios de comunicación. Tres granadas explotaron en la edificación, mientras que otra no detonó, precisó el jefe de seguridad del TSJ, Jean Carlos Stanford.
El gobierno vincula el hecho con un intento de golpe de Estado contra el presidente Nicolás Maduro por parte de «factores extremistas» de la oposición, que el miércoles deslindó cualquier responsabilidad, según una declaración del diputado Juan Guaidó.
«Esto no nos va a amilanar. Esto se hace para amedrentar a los magistrados y jueces, pero lo que hace es fortalecernos, unirnos más, para tomar las decisiones que necesita el país para su estabilidad y democracia», dijo Moreno ante los embajadores en un acto posterior.
El canciller también instó a los diplomáticos a condenar el ataque, que catalogó como un «crimen de guerra».
«Por favor, entiendan la magnitud de lo que se está haciendo contra Venezuela, reporten a sus capitales la realidad. Hay muchas cosas por criticar, pero esto es para condenar, no para criticar al gobierno o a las víctimas», señaló.
Moncada llamó además a los embajadores a ver «quiénes son los cómplices de estos criminales en Venezuela», y fustigó a quienes han puesto en duda la veracidad del atentado.
AFP