Una costurera de profesión, quien invertía su tiempo libre en vender plátanos y atender a sus hijas de nueve y 12 años de edad, fue estrangulada con el cable de su propia plancha; la misma que utilizó por última vez la mañana del pasado viernes, para alisar las camisas de los uniformes de sus descendientes antes que salieran a la escuela.
El fatídico hecho ocurrió en la casa número 080 de la calle Miranda del sector El Araguaney II en El Alto de Soapire en Santa Lucía del Tuy, municipio Paz Castillo. El cuerpo sin vida de Triny Luismar Pallares Cedeño, de 30 años de edad, estaba sobre una cama en una de las dos habitaciones de la casa. La víctima estaba con las manos atadas a la espalda, los pies amarrados y su cuello estaba enrollado el cable de la plancha.
Se llevó varias cosas
La versión de los hechos señala que el crimen fue cometido entre las 8:00 y 9:00 de la mañana del pasado viernes. Del suceso, familiares de la mujer, señalan a un hombre de nombre Wilkar Josué Reyes, quien desde hace una semana se había convertido en amigo de la hoy occisa. Ambos, se conocieron en una fiesta a través de unos allegados de la costurera. Al parecer, Reyes no tenía dónde pernoctar y Pallares Cedeño le ofreció alojo.
Los vecinos aseguraron que vieron a Reyes por última vez salir de la casa de la infortunada a eso de las 9:30am del viernes. El hombre llevaba un bolso con varios objetos. En la residencia no fueron halladas las computadoras portátiles (canaimitas) de las hijas de la infortunada, entre otras cosas.
Por el techo…
“El viernes al mediodía las hijas de Triny Luismar llegaron a su vivienda, tocaron, pero no les abrieron la puerta, por lo que pensaron que su madre estaba comprando plátanos, cosa que regularmente hacía, y decidieron irse a la casa de su tía quien vive enfrente. Ahí, pasaron el resto del día, hasta que llegó la noche y se quedaron a dormir”, comentaron parientes de la hoy difunta, al tiempo que revelaron que la preocupación aumentó porque trascurría el día sábado y no sabían nada de la costurera. Ya eran las 4:00 de la tarde y la mujer no aparecía. La angustia los llevó a acercarse nuevamente a la vivienda de la mujer y se percataron que aún estaban prendidos el televisor y un ventilador, lo cual no era usual por tanto tiempo. Cuando husmaron más a profundidad sintieron que del inmueble salía un mal olor, por lo que ubicaron al exmarido de Pallares Cedeño y padre de sus dos hijas, para que entrara a la morada para saber qué estaba sucediendo. El hombre subió a una pared, levantó una lámina de zinc, saltó al interior de la casa, caminó hasta las habitaciones, las cuales se comunican entre sí, y ahí estaba el cuerpo descompuesto de su exmujer.
Llegó la policía
Funcionarios de la Policía Municipal de Paz Castillo fueron alertados del hallazgo y al sitio arribó una comisión, que posteriormente notificó del hecho al Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas de los Valles del Tuy; presentándose al lugar detectives del Eje contra Homicidios, quienes indagan el suceso.
Extraoficialmente, se supo que un segundo elemento, quien responde al nombre de Sergio, estaría implicado en este crimen. El Cicpc indaga para determinar las responsabilidades.
MIP-TUY / Jean Carlos Rodríguez
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