Pacientes con cáncer, con enfermedades crónicas y trasplantados protestaron durante la mañana de este lunes ante la sede del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (Pnud) para presionar al gobierno del presidente Nicolás Maduro a que atienda la severa crisis de medicamentos que golpea a Venezuela.
Los afectados exigieron al Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (Ivss) dotar de los medicamentos necesarios para cubrir sus necesidades. Algunos de los pacientes denunciaron que el organismo no surte medicamentos claves para tratamientos oncológicos y para evitar el rechazo de trasplantes desde hace ocho meses. Una semana antes de esta protesta, se conoció que dos pacientes perdieron un riñón donado por falta de los inmunosupresores que debe tomar de por vida.
Los manifestantes, junto a representantes de la Coalición de Organizaciones por el Derecho a la Salud y la Vida (Codevida) y de Provea, se reunieron en la entrada del organismo de las Naciones Unidas en Los Palos Grandes. Allí ofrecieron dramáticos testimonios sobre la falta de medicinas, estimada en 90 % en los hospitales públicos, según gremios del sector salud.
Ante la desesperación por la escasez, los pacientes denunciaron haber recurrido al uso de medicamentos veterinarios. Norma González, con trasplante renal desde hace cinco años, protestó porque tiene tres meses sin conseguir sus medicinas. Denunció que las medicinas le alcanzan hasta el 15 de diciembre. “Estoy bastante asustada. Mis hijos recorrieron varias farmacias aquí en Caracas y solo consiguieron (el antinflamatorio) prednisona veterinario”.
González también aseguró que el uso del Prograf, un medicamento importado por el gobierno desde la India, le generó reacciones alérgicas en la piel. Dijo que ha acudido en innumerables ocasiones a la sede del Seguro Social en Caracas para clamar por la ayuda oficial.
Una paciente de cáncer de mama que no se identificó ante los periodistas denunció que la ausencia de medicamentos desde hace ocho meses para cumplir con su tratamiento le ha generado metástasis.
Yelagnia Ochoa de Castillo, quien tiene 67 años de edad salió a las 2:00 am desde la ciudad de Guama, estado Yaracuy, para participar en la manifestación. Este lunes cumplió 32 años con un trasplante renal. Y tres décadas después está “viviendo de la caridad” de otros pacientes para mantener su órgano, afirmó.
Ochoa declaró que las medicinas que suele tomar le alcanzan hasta el mes de enero. “El Ivss es el encargado de darme mis medicamentos. Esto es un derecho y un deber que tanto ellos como nosotros tenemos”. Informó que actualmente se encuentra tomando medicinas vencidas porque no las consigue. “Estamos dando lástima”.
Kevin Blanco recibió un trasplante renal hace 18 años. Actualmente tiene 49 años de edad y tampoco consigue sus medicamentos. Denunció que el gobierno de Maduro no permite la ayuda humanitaria ni las importaciones de las medicinas para atender a pacientes con enfermedades crónicas.
Al igual que otros enfermos, Blanco dijo que tiene medicinas para apenas diez días. Espera que algún conocido le traiga medicinas compradas en otro país.
“Uno sabe lo que pasa al estar en una máquina de diálisis. Sientes que estás a un paso de la muerte. Aquí es lo mismo, pero al no tener la medicina, sabes que tu cuerpo puede rechazar el trasplante o vas a la máquina y mueres”, declaró Blanco al portal E lEestímulo.
Temió porque las medicinas importadas en la India puedan ocasionarle reacciones desfavorables. Blanco se trata en el Hospital Pérez Carreño, donde “te dan una especie de plan para poder sobrevivir”, apuntó.
Anteriormente, Blanco tenía miedo de salir a protestar por las represalias que toma el Gobierno ante las denuncias. “Ellos dicen que a nosotros nos pagan los laboratorios. A mí no me da miedo porque me están matando igualito. Puede que muera de un tiro o de un golpe, pero prefiero morir luchando por la verdad sobre la crisis que estamos atravesando”, declaró.
Los manifestantes se trasladaron luego a la sede de la embajada de Canadá en Venezuela para exigir la apertura de un canal humanitario. Francisco Valencia, presidente de Codevida, dijo que manifestaciones similares se realizarán en varias sedes diplomáticas de la capital para presionar por medidas a favor del futuro de los pacientes.