El karateca venezolano Antonio Díaz se llevó el mundial de París, tras ganar todos sus combates. Ahora espera cerrar el año con otro triunfo en Austria
«Ganar no fue fácil, cualquiera podría pensar que sí lo fue dado que gané todos mis combates 5-0, pero en realidad hubo mucho que hacer, allí estaban los mejores», destacó este viernes el karateca venezolano Antonio Díaz, quien revalidó su título de campeón la semana pasada en el XXI Mundial de Karate, en París.
La pasión y entrega que Díaz demuestra sobre el tatami quedó certificada en su última pelea, en la cual venció al francés Minh Dack, 5-0. «Él era el gran favorito por ser el local pero el público supo reconocer mi trabajo con sus aplausos y eso para mí también fue motivante», relató, durante una entrevista en Venezolana de Televisión.
Fue en 2010 fue cuando este caraqueño saboreó por vez primera la gloria y, aunque ya tenía otros triunfos en su carrera, fue ese año cuando materializó su sueño de ser el máximo monarca de la especialidad, en Serbia, tras un intento fallido en 2008.
«Cuando en el 2010 pude convertirme en el campeón del mundo en Kata me dediqué a prepararme más porque no podía soltar ese título así de fácil, después de haber luchado tanto para conseguirlo», expresó.
En su camino por la medalla de oro en París derrotó al ruso Emil Skovorodnikov, después cayó el iraní Farid Haghighi; en la cuarta ronda despachó al checo Vladimir Micek; en cuartos de final eliminó al australiano James Adams Giuliano y en semifinales al japonés Kiyuna Ryo.
Esta es la sexta presea de Díaz en estas citas. Antes de colgarse el oro en Serbia había ganado la plata, en Japón 2008, y tres de bronce, en España 2002, México 2004 y Finlandia 2006.
Sus palabras de agradecimiento son para el pueblo venezolano por el apoyo que han demostrado a su carrera «igual a mis padres y entrenadores que se han propuesto motivarme, impulsarme y ayudarme a mantener en la élite de este deporte que aspira ser parte de los Juegos Olímpicos en 2020».
El último reto del año
Luego de su categórico triunfo en París sólo le resta competir este año en la última válida de la Premier League, que se disputará entre el 8 y 9 de diciembre en Austria. A su regreso, el criollo aspira a tomarse unos días de descanso para compartir las fiestas decembrinas con sus familiares y amigos, al tiempo que planificará su agenda para 2013.
«Tengo pensado varios proyectos, entre ellos la apertura de un gimnasio para iniciar con esa fase de entrenador. Sé que hay una generación de relevo muy buena que viene atrás de mí y me sentiría muy orgulloso si puedo contribuir con su formación», resaltó.
El máximo sueño de este karateca es que su disciplina forme parte de los Juegos Olímpicos y aunque para ese período «tal vez ya no estaré compitiendo, seré feliz de ver a otros que sí cumplan ese anhelo de llegar a la máxima justa del deporte».
Uno de los objetivos sobre los que el atleta tiene la mirada puesta son los Juegos Mundiales de Cali, Colombia, en julio de 2013. «Allá demostraré que este deporte posee grandes virtudes y merece ese puesto en los Olímpicos», sentenció.