Un experto de la Organización Mundial de la Salud (OMS) evaluará el impacto en la sanidad de las personas afectadas por la erupción del volcán de Fuego en Guatemala que ha dejado 112 muertos, informó este jueves el Ministerio de Salud Pública de Guatemala (MSPAS).
La referida institución informó, a través de un comunicado, que Peter Baxter, asesor inglés de la Organización Panamericana de la Salud y la OMS, realizará el estudio durante nueve días tras la potente erupción del pasado 3 de junio.
Baxter, experto en erupciones volcánicas y salud, brindará asistencia técnica al MSPAS “sobre el impacto de la erupción del volcán de Fuego en la salud de las personas a corto, mediano y largo plazo”, precisó el texto.
El asesor visitará los hospitales donde se encuentran recluidas personas afectadas por el deslave de material volcánico que sepultó la comunidad San Miguel Los Lotes, en la ciudad de Escuintla, y obligó a evacuar poblados cercanos.
“Según Baxter son varios los efectos e impacto que la erupción de un volcán pueden presentar en las personas principalmente en el aparato respiratorio, la piel y los ojos, especialmente en los adultos mayores y niños”, agregó el ministerio.
El asesor también tomará muestras de la ceniza volcánica y agua en el área afectada.
“También la ingesta de alimentos y agua contaminada con los metales que contiene la ceniza del volcán pueden causar desde enfermedades gastrointestinales hasta complicaciones severas en enfermos crónicos”, precisó el comunicado.
La catástrofe se ha cobrado la vida de 112 personas, las dos últimas una niña y un adulto que murieron el martes en centros especializados para quemaduras en Estados Unidos y México, respectivamente.
El gobierno suspendió la búsqueda de 197 personas que se encuentran desaparecidas, pero vecinos siguen entrando a la llamada zona cero con la esperanza de encontrar a sus familiares
Por la tragedia siguen en albergues 3.623 personas de la comunidad devastada y de aldeas vecinas que permanecen en riesgo de nuevos deslaves del volcán.
El volcán de Fuego, de 3.763 metros de altura y situado 35 km al suroeste de la capital, sigue en constante actividad y las fuertes lluvias han provocado que avalanchas de sedimentos volcánicos y agua desciendan por las cuencas naturales del coloso, aumentando la posibilidad de inundaciones.