La Fiscalía venezolana informó hoy de la detención de cuatro personas a las que acusa de profanar tumbas y simular las cremaciones de al menos 18 cadáveres, una operación que se hacía a través de un crematorio en el estado de Cojedes (oeste) y una funeraria en Caracas.
El Ministerio Público venezolano (MP) detalló en un comunicado que los ciudadanos Juan Laya, propietario del crematorio «Kamesh», así como Eiver Hernández, responsable de la funeraria «Memorable», fueron detenidos luego de que las autoridades detectaran que enterraban en fosas de un cementerio del estado de Aragua (centro) los cadáveres que debían ser cremados en Cojedes.
Asimismo, fueron apresados el ayudante funerario Roger Rodríguez y el chofer Alejandro Olmedo, cómplices de estas actividades que la Fiscalía asegura constituyen una «estafa calificada continuada».
El delito se descubrió cuando funcionarios de la Policía científica venezolana efectuaban un recorrido en las cercanías de un cementerio de Maracay, capital del estado de Aragua.
En ese lugar hallaron 18 cadáveres, «registros de defunción, permisos de traslados y cremación de 20 fallecidos, así como palas, martillos y una camioneta», se señala en el comunicado del MP.
Por este hecho se detuvo a Rodríguez y Olmedo y se inició una investigación.
«Los (familiares) afectados manifestaron que los hoy privados de libertad les entregaron las supuestas cenizas de sus difuntos, pero investigaciones coordinadas por el Ministerio Público demostraron que estas no correspondían con restos humanos», reza el texto.
Los detenidos fueron acusados por los delitos de «profanación de tumba, estafa calificada continuada y asociación» para delinquir.
Esta noticia se difunde cuando medios locales reportan que muchos venezolanos están enterrando a sus muertos en patios y con urnas improvisadas o de cartón debido a la imposibilidad de costear los pagos de funerales y entierros por la severa crisis económica que golpea al país.EFE