El fiscal general de Arabia Saudita afirmó este jueves, citando información proporcionada por Turquía, que los sospechosos del asesinato del periodista Jamal Khashoggi cometieron un acto «premeditado».
La investigación continúa, dijo el fiscal en un comunicado.
Khashoggi, un periodista y opositor saudita, fue asesinado el 2 de octubre dentro del consulado del país en Estambul.
Según los responsables turcos, Khashoggi fue asesinado por un equipo de agentes venidos de Riad.
Las autoridades del país, bajo presión internacional, dieron varias versiones. En un primer momento hablaron de una «pelea» y más tarde de una operación «no autorizada» de la que el príncipe heredero, Mohamed bin Salmán, el hombre fuerte del país, no habría sido informado.
En total 18 sospechosos, todos sauditas, fueron detenidos en Arabia y varios altos responsables de los servicios de información fueron despedidos.
Poco después del anuncio del fiscal, los medios estatales indicaron que el príncipe Mohamed, de 33 años, presidió el jueves la última reunión de una comisión encargada de restructurar los servicios de inteligencia.
El miércoles, el príncipe heredero habló por primera vez del caso, que calificó de «incidente repulsivo» y «doloroso». El asesinato del periodista desató la indignación internacional y empañó la imagen del país, primer exportador mundial de petróleo.
Por otro lado, el hijo de Jamal Khashoggi, Salah, viajó junto a su familia rumbo a Estados Unidos, después de que el gobierno saudita levantara la prohibición de viajar, anunció la organización Human Rights Watch (HRW).
En Estambul decenas de allegados de Jamal Khashoggi se reunieron frente al consulado de Arabia Saudita y encendieron velas para pedir justicia. constató un corresponsal de la AFP.
«¿Donde está el cuerpo?»
Este jueves el ministro turco de Exteriores dijo que sigue habiendo preguntas a las que Riad debe responder, sobre todo sobre la identidad de los autores y el lugar donde está el cuerpo.
«Hay preguntas que necesitan respuestas», dijo Mevlüt Cavusoglu. «Dieciocho personas fueron detenidas [en Arabia Saudita], ¿por qué ellas? ¿Quién les dio órdenes? (…) El cuerpo de Jamal Khashoggi todavía no ha sido encontrado. ¿Donde está?»
Por otra parte, los responsables sauditas intentaban este jueves dar un balance positivo de la conferencia económica FII, a la que muchos lideres políticos y económicos renunciaron a ir.
La conferencia fue «fantástica», aseguró el ministro de Finanzas, Mohammed Al Jadaan. Por su parte el ministro de energía, Jaled al Faleh, aseguró que las compañías extranjeras que no acudieron pidieron «perdón» y prometieron que volverían.
Compromiso «personal»
Los organizadores del FII y el ministerio saudita de la Información aseguraron que el foro económico favoreció acuerdos o proyectos de acuerdo por valor de decenas de miles de millones de dólares.
Igual que en 2017, la conferencia internacional tenía el objetivo de atraer capitales a Arabia Saudita para convertir este país desértico en un destino para los negocios.
Durante el foro, Mohamed bin Salmán habló de las reformas y aseguró que «en los próximos cinco años Arabia Saudita será totalmente distinta».
«Si en los próximos cinco años tenemos éxito, otros países [de la región] nos seguirán», dijo en el FII. «Es la batalla de los sauditas y es mi batalla en la que estoy comprometido personalmente».
Pero las versiones contradictorias de Riad continúan suscitando preguntas y escepticismo.
Esta semana, Estados Unidos anunció una primera medida de presión, la revocación de los visados de 21 sospechosos sauditas. Por su parte Gran Bretaña también anuló la posibilidad de otorgarles visados.
Francia dijo por su parte estar dispuesta a imponer «sanciones internacionales» contra los «culpables».
El presidente estadounidense Donald Trump, aliado de Arabia Saudita, dijo que la operación de disimulación saudita, «una de las peores de la historia», según él, fue un «fiasco total».
La Eurocámara estimó este jueves «altamente improbable» que el príncipe heredero saudita, Mohamed bin Salmán, no estuviera al corriente del asesinato del periodista y llamó además a un embargo de armas contra Arabia Saudita.
Por 325 votos a favor, uno en contra y 19 abstenciones, los eurodiputados piden además a los países de la UE que «se preparen para imponer sanciones específicas contra ciudadanos sauditas» y «sanciones por motivos de derechos humanos» contra Arabia.