El jefe del Parlamento de Venezuela, Juan Guaidó, a quien una cincuentena de países reconocen como presidente encargado, dijo este viernes que «no está planteada» otra reunión exploratoria entre la oposición y el Gobierno de Nicolás Maduro para sentar las bases de una nueva mesa de negociaciones.
«Hoy no está planteado. ¿Por qué? Porque si no aproxima a eso (abandono de Maduro del poder) no sirve, punto. No está planteada ninguna reunión», dijo durante en acto con simpatizantes, gremios y patronales en el estado de Carabobo (centro-norte).
Con estas declaraciones Guaidó respondió a los crecientes rumores sobre una nueva reunión en Noruega entre representantes opositores y del Gobierno, que ya se han encontrado dos veces para buscar una salida a la acuciante crisis política y económica que atraviesa la nación suramericana.
«Cuando haya información nueva yo les informaré, pero hoy no está planteada una nueva reunión», insistió ante las preguntas de los periodistas.
Guaidó también pidió a los simpatizantes del antichavismo confiar en «la ruta» que ha emprendido para desalojar a Maduro del poder, que ejerce desde 2013, pese a reconocer que los dirigentes opositores han cometido errores.
«No somos tontos», dijo al apuntar que la delegación de Maduro asistió a las primeras dos reuniones exploratorias con una agenda distinta a la que tienen los opositores.
«Pero cada paso que demos, en el momento que lo demos, será porque estamos más cerca del cese la usurpación (…), cuando vayamos a cada uno de esos espacios alégrense», añadió.
Indicó que es Maduro quien desea las negociaciones porque tiene «problemas» de autoridad en el mundo militar y ha perdido el reconocimiento de los principales países de la región y Estados Unidos, hasta hace poco el mayor socio comercial de Venezuela.
«Nosotros (los venezolanos) simplemente sufrimos las consecuencias (de la crisis)», apuntó.
El pasado 29 de mayo el Centro de Comunicaciones del Gobierno que designó Guaidó informó que la última reunión celebrada en Oslo entre las partes culminó «sin acuerdo», pese a que esa misma jornada Maduro saludó la construcción de lo que consideró una «fase de diálogo» con la oposición.
Venezuela atraviesa una escalada de tensión política desde enero pasado, cuando Maduro juró un nuevo mandato de seis años tras ganar unas elecciones que fueron tachadas de fraudulentas por la oposición.
En respuesta, Guaidó se proclamó presidente interino y fue reconocido por más de 50 países, con Estados Unidos a la cabeza.
Desde entonces, el conflicto se ha agudizado y varios países, entre ellos Noruega, intentan impulsar mecanismos para encontrar una solución negociada a la crisis.
Noruega ha ejercido como facilitador en una veintena de procesos de diálogo en las últimas décadas, como el que llevó a la firma de los acuerdos de Oslo entre israelíes y palestinos o las conversaciones entre el Gobierno colombiano y las FARC.
EFE